Yo sé, oh Dios m o, que tú sondeas los corazones y amas la rectitud; por eso con rectitud de corazón te he ofrecido espontáneamente todo esto, y ahora veo con alegr a que tu pueblo, aqu presente, te ofrece por su propia voluntad sus dones.
2 Corintios 9:7 - Biblia Castilian 2003 Cada uno dé lo que su corazón le dicte, no a disgusto ni a la fuerza, pues Dios ama al que da con alegr a. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Biblia Nueva Traducción Viviente Cada uno debe decidir en su corazón cuánto dar; y no den de mala gana ni bajo presión, «porque Dios ama a la persona que da con alegría». Biblia Católica (Latinoamericana) Cada uno dé según lo que decidió personalmente, y no de mala gana o a la fuerza, pues Dios ama al que da con corazón alegre. La Biblia Textual 3a Edicion Cada uno dé como se propuso en su corazón; no con tristeza o por obligación, porque Dios ama al dador alegre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cada uno dé lo que su corazón le dicte, no a disgusto ni a la fuerza, pues Dios ama al que da con alegría. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Cada uno dé como propuso en su corazón; no con tristeza, o por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. |
Yo sé, oh Dios m o, que tú sondeas los corazones y amas la rectitud; por eso con rectitud de corazón te he ofrecido espontáneamente todo esto, y ahora veo con alegr a que tu pueblo, aqu presente, te ofrece por su propia voluntad sus dones.
El pueblo se alegró por aquellos donativos voluntarios, porque los hab an ofrecido de todo corazón y espontáneamente a Yahveh. También el rey David sintió una inmensa alegr a.
'Di a los israelitas que me traigan ofrendas; vosotros las recibiréis, para m, de todo aquel que las ofrezca de buen corazón.
separad de vuestros bienes ofrendas para Yahveh. Todos los hombres de corazón generoso aportarán como ofrenda a Yahveh oro, plata y bronce,
En todo procuré ense aros con mi ejemplo que as, con fatigas, hay que socorrer a los necesitados y recordar las palabras del Se or Jesús, que dijo: 'Hay más felicidad en dar que en recibir''.
si el de exhortar, que exhorte; el que da, que dé con sencillez; el que preside, que lo haga con solicitud; el que practica la misericordia, que la practique con alegr a.
Porque cuando hay buena voluntad, se acepta con gusto lo que uno tiene y no se le pide lo que no tiene.
sino que le harás un generoso donativo de tu ganado menor, de tu era, de tu lagar; de aquello con que Yahveh, tu Dios, te ha bendecido le darás.
no obstante, nada he querido hacer sin tu consentimiento, para que esta buena acción tuya no resultara como hecha por compromiso, sino con espontaneidad.
No os quejéis, hermanos, unos de otros, para no ser juzgados. Mirad que el juez está ya a la puerta.