Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




2 Corintios 7:10 - Biblia Castilian 2003

Pues la tristeza que es según Dios produce una conversión saludable, de la cual no hay que tener pesar; mientras que la tristeza del mundo produce la muerte.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

Pues la clase de tristeza que Dios desea que suframos nos aleja del pecado y trae como resultado salvación. No hay que lamentarse por esa clase de tristeza; pero la tristeza del mundo, a la cual le falta arrepentimiento, resulta en muerte espiritual.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

La tristeza que viene de Dios lleva al arrepentimiento y realiza una obra de salvación que no se perderá. Por el contrario, la tristeza que inspira el mundo provoca muerte.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Porque la tristeza que es según Dios, causa arrepentimiento para salvación sin remordimiento, pero la tristeza del mundo produce muerte.

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pues la tristeza que es según Dios produce una conversión saludable, de la cual no hay que tener pesar; mientras que la tristeza del mundo produce la muerte.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; mas la tristeza del mundo produce muerte.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



2 Corintios 7:10
32 Referans Kwoze  

Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, tuvo celos de su hermana, y dec a a Jacob: 'Dame hijos o me muero'.


Dijo entonces David a Natán: 'He pecado contra Yahveh'. A lo que replicó Natán: 'Yahveh ha perdonado tu pecado; no morirás.


Éste le preguntó: '¿Por qué tú, hijo del rey, estás cada d a más macilento? ¿No me lo vas a descubrir?'. Amnón le respondió: 'Es que estoy enamorado de Tamar, hermana de mi hermano Absalón'.


Cuando Ajitófel vio que no se hab a seguido su consejo, aparejó el asno, emprendió el camino y se fue a su casa, a su ciudad; después de disponer de sus cosas, se ahorcó y murió. Fue sepultado en el sepulcro de su padre.


Ajab entró en su casa triste e irritado por la respuesta que le hab a dado Nabot de Yizreel, al decirle: 'No te entregaré la heredad de mis padres'. Se acostó en su lecho, volvió el rostro hacia la pared y no quiso comer.


En verdad, estoy a punto de caer con mi dolor siempre a la vista.


Corazón alegre anima el rostro, corazón apenado abate el esp ritu.


Todos los d as son malos para el pobre, el dichoso goza de perpetuo fest n.


Corazón alegre procura remedio, esp ritu abatido reseca los huesos.


El esp ritu del hombre resiste la enfermedad; pero esp ritu abatido, ¿quién lo levantará?


Más vale la pena que la risa, porque el rostro triste hace bien al corazón.


Vienen con llanto y los gu o con alivio; los llevo a torrentes de agua, por camino recto, donde no tropiecen, porque soy para Israel un padre y Efra n es mi primogénito'.


Los supervivientes huirán, vagarán por los montes, como las palomas de los valles, gimiendo todos ellos por su iniquidad.


Al ver Dios lo que hac an y cómo se hab an convertido de su mala conducta, se arrepintió del mal con que los hab a amenazado y no lo ejecutó.


V stanse de saco hombres y animales, clamen a Dios con vehemencia, y conviértase cada cual de su mala conducta y de la violencia de sus manos.


Pero Dios respondió a Jonás: '¿Crees que es razonable que te irrites por lo del ricino?'. Él contestó: 'Tengo toda la razón para enojarme hasta desearme la muerte'.


Se acordó entonces Pedro de aquello que Jesús le hab a dicho: 'Antes que el gallo cante, me habrás negado tres veces'. Y saliendo afuera, lloró amargamente.


Igualmente - os digo - hay gran alegr a entre los ángeles del cielo por un solo pecador que se convierte'.


En cambio, el publicano se quedó a distancia y ni siquiera se atrev a a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: '¡Oh Dios! Ten misericordia de m, que soy pecador'.


Al o r esto, se tranquilizaron y glorificaron a Dios diciendo: 'Según esto, Dios ha dado también a los gentiles la conversión que conduce a la vida''.


Arrepent os, pues, y convert os, para que sean borrados vuestros pecados,


y que, al llegar yo de nuevo, me humille mi Dios ante vosotros, y tenga que llorar por muchos de los que antes pecaron y no se convirtieron de la impureza, fornicación y libertinaje que cometieron.


ahora me alegro, no porque os entristecisteis, sino porque esa tristeza provocó vuestra conversión. Porque os entristecisteis según Dios, de modo que no sufristeis ningún da o por nuestra parte.


Pues bien sabéis que después, cuando se empe ó en heredar la bendición, fue rechazado, ya que, por más que la solicitó a lágrima viva, no logró un cambio de parecer.


David se vio entonces en un grave aprieto, porque la gente hablaba de lapidarlo, ya que todos estaban llenos de amargura por sus hijos e hijas. Pero David cobró ánimos en Yahveh, su Dios.