2 Corintios 6:11 - Biblia Castilian 2003 Os hemos hablado con toda franqueza, corintios, y se nos ha ensanchado el corazón. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Nuestra boca se ha abierto a vosotros, oh corintios; nuestro corazón se ha ensanchado. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Oh, queridos amigos corintios!, les hemos hablado con toda sinceridad y nuestro corazón está abierto a ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) Corintios, les hablo con franqueza; les abro mi corazón. La Biblia Textual 3a Edicion Nuestra boca os está abierta, oh corintios, nuestro corazón se ha ensanchado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Os hemos hablado con toda franqueza, corintios, y se nos ha ensanchado el corazón. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Nuestra boca está abierta a vosotros, oh corintios; nuestro corazón se ha ensanchado. |
Entonces lo verás y estarás radiante, palpitará y se ensanchará tu corazón, pues se volcará sobre ti la riqueza del mar, los tesoros de las naciones vendrán a ti.
Ahora bien, la mano de Yahveh hab a venido sobre m por la tarde, antes de que llegara el fugitivo, y abrió mi boca por la ma ana, antes de que se presentara el fugitivo. Se me abrió la boca y ya no volv a estar mudo.
Ciertamente la riqueza enga a al hombre altivo e infatigable que dilata sus fauces como el seol y es insaciable como la muerte, que se apodera de todas las naciones y se adue a de todos los pueblos.
Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Se or con toda su casa, y muchos de los oyentes corintios cre an y se bautizaban.
Y yo muy a gusto lo gastaré todo, y me desgastaré a m mismo, por vuestras almas. Amándoos más, ¿seré menos amado?
Por eso, llevado de mucha angustia y ansiedad de corazón, os escrib con muchas lágrimas. Pero no para proporcionaros disgusto, sino para daros a conocer el amor tan especial que siento por vosotros.
¡Oh insensatos gálatas! ¿Quién os ha fascinado, a vosotros, ante cuyos ojos ha sido presentado Jesucristo crucificado?
Os lo suplico, hermanos: sed como yo, que también yo me hice como vosotros. En nada me habéis ofendido.
y también por m, para que Dios ponga su Palabra en mis labios y me conceda anunciar con valent a el misterio del Evangelio,
sabiendo que cada cual, sea esclavo o libre, será recompensado por el Se or conforme al bien que hiciere.
Dios me es testigo de cuántos deseos tengo, en las entra as de Cristo Jesús, de estar con todos vosotros.
También sabéis vosotros, filipenses, que en los comienzos del Evangelio, cuando sal de Macedonia, ninguna iglesia abrió conmigo cuentas de gastos e ingresos, sino sólo vosotros;
Mirad: vengo en seguida y traigo aqu la recompensa conmigo, para dar a cada uno según sean sus obras.
Entonces Ana hizo esta plegaria: 'Salta de júbilo mi corazón por Yahveh, mi poder se exalta en Yahveh; mi boca se abre contra mis enemigos, pues me he alegrado con tu ayuda.