2 Corintios 1:23 - Biblia Castilian 2003 Por mi vida, y pongo a Dios por testigo, que si no he ido todav a a Corinto ha sido precisamente por consideración a vosotros. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Mas yo invoco a Dios por testigo sobre mi alma, que por ser indulgente con vosotros no he pasado todavía a Corinto. Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora pongo a Dios por testigo de que les digo la verdad. La razón por la cual no regresé a Corinto fue para ahorrarles una severa reprimenda; Biblia Católica (Latinoamericana) Dios sabe, y se lo juro por mi propia vida, que sólo la misericordia hacia ustedes me inspiró no volver a Corinto. La Biblia Textual 3a Edicion Pero yo invoco a Dios como testigo sobre mi alma, de que por consideración a vosotros no he ido aún° a Corinto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por mi vida, y pongo a Dios por testigo, que si no he ido todavía a Corinto ha sido precisamente por consideración a vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas yo invoco a Dios por testigo sobre mi alma, que por ser indulgente con vosotros no he pasado todavía a Corinto. |
Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Se or con toda su casa, y muchos de los oyentes corintios cre an y se bautizaban.
Porque Dios, a quien doy culto en mi esp ritu anunciando el evangelio de su Hijo, me es testigo de que os recuerdo incensantemente
Digo la verdad en Cristo, no miento - y de ello me da testimonio mi conciencia en el Esp ritu Santo -:
¿Qué queréis: que vaya yo a vosotros vara en mano, o con amor y esp ritu de mansedumbre?
que ese hombre sea entregado a Satanás, para que se destruya lo puramente humano y se salve el esp ritu el d a del Se or.
Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, a la iglesia de Dios que está en Corinto y a todos los fieles que están en Acaya entera:
Os suplico, pues, que una vez que no esté entre vosotros, no tenga que emplear aquella osad a con que opino que debo proceder contra algunos que piensan que nosotros caminamos según la carne.
¡Por la verdad de Cristo que hay en m: no me será arrebatada esta gloria en las regiones de Acaya!
El Dios y Padre del Se or Jesús - el que es bendito por los siglos - sabe bien que no miento.
Porque temo que quizás, al llegar, no os encuentre tales como yo quisiera, y que vosotros me encontréis a m tal como no querr ais: que tal vez haya discordia, envidia, enconos, rivalidades, calumnias, murmuraciones, arrogancias, desórdenes;
Por eso escribo estas cosas estando ausente, para que, cuando me presente, no tenga que usar con rigor de la autoridad que el Se or me dio para edificar, y no para destruir.
Dije antes, y ahora repito, ausente, lo mismo que hice la segunda vez, cuando estaba presente, a los que antes pecaron y a todos los demás: que, de venir otra vez, ya no tendré miramientos,
con honradez, con conocimiento, con comprensión, con bondad, con Esp ritu Santo, con amor sincero,
Dios me es testigo de cuántos deseos tengo, en las entra as de Cristo Jesús, de estar con todos vosotros.
Nunca recurrimos, como bien sabéis, a la adulación ni movidos por oculta codicia. Dios es testigo de ello.
entre ellos Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás, para que aprendan a no blasfemar.