1 Timoteo 5:21 - Biblia Castilian 2003 En la presencia de Dios y Cristo Jesús y de los ángeles, sus elegidos, te encargo solemnemente que observes estas normas, sin prejuicio, siendo en todo imparcial. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, y de sus ángeles escogidos, que guardes estas cosas sin prejuicios, no haciendo nada con parcialidad. Biblia Nueva Traducción Viviente Te ordeno solemnemente, en presencia de Dios y de Cristo Jesús y de los ángeles altísimos, que obedezcas estas instrucciones sin tomar partido ni mostrar favoritismo por nadie. Biblia Católica (Latinoamericana) Te pido insistentemente ante Dios, Cristo Jesús y los santos ángeles que observes estas reglas con imparcialidad, sin hacer diferencias. La Biblia Textual 3a Edicion Te encargo solemnemente delante de Dios y de Jesús el Mesías y de los° ángeles escogidos, que obedezcas estas normas sin prejuicio, no haciendo nada con parcialidad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 En la presencia de Dios y Cristo Jesús y de los ángeles, sus elegidos, te encargo solemnemente que observes estas normas, sin prejuicio, siendo en todo imparcial. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Te exhorto delante de Dios y del Señor Jesucristo, y de sus ángeles escogidos, a que guardes estas cosas sin prejuicios, que nada hagas con parcialidad. |
Se tomarán otras piedras, que se colocarán en lugar de las que fueron quitadas; luego la casa se encalará de nuevo.
No dictarás sentencias injustas en tus juicios ni por favorecer al débil ni por complacer al poderoso. Juzgarás a tu prójimo con justicia.
Por eso, también yo os he hecho despreciables y viles ante todo el pueblo, de la misma manera que vosotros no habéis seguido mis caminos no habéis sido imparciales ante la ley.
Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces dará a cada uno conforme a su conducta.
Entonces dirá también el rey a los de la izquierda: 'Apartaos de m, malditos, al fuego eterno que está preparado para el diablo y sus ángeles.
y ense ándoles a observar todo cuanto yo os he mandado. Y mirad: yo estoy con vosotros todos los d as hasta el final de los tiempos'.
Hiciéronle, pues, esta pregunta: 'Maestro, sabemos que hablas y ense as con rectitud y que no te importa la condición de las personas, sino que ense as realmente el camino de Dios.
Porque, si alguno se avergüenza de m y de mis palabras, el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en su gloria y la de su Padre y la de los santos ángeles.
As que nosotros, desde ahora en adelante, a nadie conocemos por su condición puramente humana; y aunque hubiéramos conocido a Cristo por su condición puramente humana, ahora ya no lo conocemos as.
Poneos en marcha, levantad el campamento y entrad en la monta a de los amorreos y en todas sus cercan as, en la Arabá, en la Monta a, en la Sefelá, en el Negueb, en el litoral, en tierra de cananeos, y en el L bano, hasta el r o grande, el Éufrates.
el que dijo de su padre y de su madre: no les he visto, el que no reconoce a sus hermanos, y a sus hijos ignora; pues ellos guardaron tu palabra y conservarán tu alianza.
Y ahora, en la presencia de Dios, que da vida a todos los seres, y de Cristo Jesús, que proclamó tan bella confesión ante Poncio Pilato, te encargo solemnemente
No dejes de recordarles esto, y conjúrales ante Dios que no se metan en discusiones de palabras, que para nada sirven, sino para echar a perder a los oyentes.
Te conjuro, en presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de juzgar a vivos y a muertos, en nombre de su venida y de su reino:
Mas la sabidur a de arriba es, ante todo, pura; luego, pac fica, moderada, indulgente, llena de misericordia y de buenos frutos, imparcial, sincera.
Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que, precipitándolos en el abismo, en cavernas tenebrosas, los entregó para ser custodiados hasta el juicio.
Y a los ángeles que no supieron conservar su alto rango, sino que abandonaron su propia morada, los tiene guardados con cadenas perpetuas, sepultados en tinieblas, para el juicio del gran d a.
beberá él también del vino del furor de Dios, vino puro, concentrado, en la copa de su ira. Será atormentado con fuego y azufre en presencia de los ángeles santos y en presencia del Cordero.