1 Samuel 30:21 - Biblia Castilian 2003 Llegó David adonde estaban los doscientos hombres que, por hallarse demasiado fatigados, no hab an podido seguir a David y se hab an quedado en el torrente Besor. Éstos salieron al encuentro de David y de los que ven an con él. David se acercó a ellos y los saludó. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y vino David a los doscientos hombres que habían quedado cansados y no habían podido seguir a David, a los cuales habían hecho quedar en el torrente de Besor; y ellos salieron a recibir a David y al pueblo que con él estaba. Y cuando David llegó a la gente, les saludó con paz. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego David regresó al arroyo de Besor y se encontró con los doscientos hombres que se habían quedado rezagados porque estaban demasiado cansados para seguir con él. Entonces salieron para encontrarse con David y con sus hombres, y David los saludó con alegría. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando David llegó cerca de los doscientos hombres que se habían detenido, demasiado cansados, ante el torrente de Besor, éstos salieron al encuentro de David y de la tropa que lo acompañaba. David se dirigió donde ellos y los saludó, La Biblia Textual 3a Edicion Y David llegó a los doscientos hombres, que de tan débiles que estaban no habían podido seguir a David, a los cuales había dejado junto al torrente Besor. Ellos salieron a recibir a David y a la gente que lo acompañaba, y cuando David se aproximó, los saludó. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Llegó David adonde estaban los doscientos hombres que, por hallarse demasiado fatigados, no habían podido seguir a David y se habían quedado en el torrente Besor. Éstos salieron al encuentro de David y de los que venían con él. David se acercó a ellos y los saludó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino David a los doscientos hombres que habían quedado cansados y no habían podido seguir a David, a los cuales habían hecho quedar en el torrente de Besor; y ellos salieron a recibir a David, y al pueblo que con él estaba. Y cuando David llegó a la gente, les saludó con paz. |
En fin, sed todos de un mismo sentir, compartid alegr as y tristezas, cultivad el amor fraterno, sed misericordiosos, humildes;
Luego, cuando llegó adonde estaba la gente de Suot, les dijo: 'Aqu tenéis a Zébaj y a Salmuná, por causa de los cuales os mofasteis de m, diciéndome: '¿Tienes ya en tu poder a Zébaj y a Salmuná, para que tengamos que dar pan a tus hombres cansados?''.
Lleva también estos diez requesones al jefe de su millar. Mira a ver cómo están tus hermanos y recibe de ellos alguna respuesta'.
David dejó las cosas que tra a al cuidado del encargado de los bagajes y se fue corriendo hacia las filas; y en cuanto llegó, preguntó a sus hermanos cómo se encontraban.
David continuó la persecución con cuatrocientos hombres, porque doscientos se quedaron por estar demasiado fatigados para atravesar el torrente Besor.
Entonces, todos los malos y perversos de entre los hombres que hab an acompa ado a David dijeron: 'Puesto que no han venido con nosotros, no se les ha de dar nada del bot n que hemos rescatado, sino solamente a cada uno su mujer y sus hijos: que se los lleven y se vayan'.