y bendijo a Abrán diciéndole: 'Bendito sea Abrán del Dios Alt simo, creador del cielo y de la tierra.
1 Samuel 15:13 - Biblia Castilian 2003 Fue entonces Samuel adonde estaba Saúl, y éste lo saludó: '¡Bendito seas de Yahveh! Ya he dado cumplimiento a la orden de Yahveh'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Vino, pues, Samuel a Saúl, y Saúl le dijo: Bendito seas tú de Jehová; yo he cumplido la palabra de Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando por fin Samuel lo encontró, Saúl lo saludó con alegría. —Que el Señor te bendiga —le dijo—. Llevé a cabo el mandato del Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando Samuel llegó donde estaba Saúl, éste le dijo: 'Yavé te bendiga, he ejecutado las órdenes de Yavé'. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Samuel fue a Saúl, y Saúl le dijo: ¡Bendito seas tú de YHVH!° ¡He cumplido el mandato de YHVH! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fue entonces Samuel adonde estaba Saúl, y éste lo saludó: '¡Bendito seas de Yahveh! Ya he dado cumplimiento a la orden de Yahveh'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Vino, pues, Samuel a Saúl, y Saúl le dijo: Bendito seas tú de Jehová; yo he cumplido la palabra de Jehová. |
y bendijo a Abrán diciéndole: 'Bendito sea Abrán del Dios Alt simo, creador del cielo y de la tierra.
Respondió el hombre: 'La mujer que me diste por compa era me dio del árbol, y com '.
y David envió mensajeros a los de Yabés de Galaad para que les dijeran: 'Benditos seáis de Yahveh, por haber cumplido esta obra de misericordia con vuestro se or Saúl, dándole sepultura.
Quien encubre sus faltas no tiene dicha; quien las confiesa y se enmienda, logrará piedad.
Alabadla por el fruto de sus manos, Tau y que sus obras la ensalcen en la plaza.
Pues igualmente vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha mandado, decid: 'Siervos inútiles somos; hemos hecho lo que ten amos que hacer''.
El fariseo, erguido, oraba as en su interior: '¡Oh Dios! Gracias te doy, porque no soy como los demás hombres: ladrones, injustos, adúlteros; ni tampoco como ese publicano.
Éste dijo a su madre: 'Los mil cien siclos de plata que te han sido hurtados y por los que lanzabas maldiciones que has hecho llegar a mis o dos, los tengo yo; yo los hab a tomado'. Dijo entonces su madre: '¡Bendito, tú, hijo m o, ante Yahveh!'.
Dijo entonces él: '¡Bendita seas tú de parte de Yahveh, hija m a! Tu segundo acto de piedad ha sido todav a mejor que el primero, pues no has ido en busca de jóvenes, pobres o ricos.
Pero apenas hab a acabado de ofrecer el holocausto, cuando llegó Samuel. Saúl le salió al encuentro para darle la bienvenida.
'Me arrepiento de haber constituido rey a Saúl, porque se ha apartado de m y no ha ejecutado mis órdenes'. Afligióse Samuel y pasó toda la noche clamando a Yahveh.
Saúl respondió a Samuel: 'Yo he obedecido la voz de Yahveh y he seguido el camino por el que Yahveh me ha enviado. He tra do a Agag, rey de Amalec, pero a los amalecitas los he entregado al anatema.
Pero Saúl y el ejército dejaron con vida a Agag y lo más selecto del ganado mayor y menor, a los animales cebados, a los corderos y todo lo que ten a valor. No quisieron consagrarlo al anatema. Sólo dedicaron al anatema lo vil y despreciable.
Respondió Saúl: '¡Benditos seáis de Yahveh, pues os habéis compadecido de m !
Uno de los criados hab a dado este aviso a Abigail, esposa de Nabal: 'Mira que David ha enviado mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, pero él los ha despachado de mala manera.