con estas instrucciones: 'As hablaréis a mi se or, a Esaú: 'Esto dice Jacob, tu siervo: he morado en casa de Labán, donde he permanecido hasta ahora.
1 Samuel 1:18 - Biblia Castilian 2003 Replicó ella: 'Que tu sierva alcance tu favor'. La mujer emprendió su camino; comió, y su semblante no fue ya como el de antes. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su camino, y comió, y no estuvo más triste. Biblia Nueva Traducción Viviente —¡Oh, muchas gracias! —exclamó ella. Así que se fue, comenzó a comer de nuevo y ya no estuvo triste. Biblia Católica (Latinoamericana) Ella le dijo a su vez: '¡Ojalá tu sirvienta sea bien vista por ti!' Se levantó, comió, y su cara tenía otro aspecto. La Biblia Textual 3a Edicion Ella dijo: ¡Halle tu sierva gracia ante tus ojos! Y la mujer se fue por su camino, y comió, y su semblante ya no fue como antes.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Replicó ella: 'Que tu sierva alcance tu favor'. La mujer emprendió su camino; comió, y su semblante no fue ya como el de antes. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y la mujer siguió su camino, y comió, y no estuvo más triste. |
con estas instrucciones: 'As hablaréis a mi se or, a Esaú: 'Esto dice Jacob, tu siervo: he morado en casa de Labán, donde he permanecido hasta ahora.
He adquirido bueyes y asnos, ganado menor, siervos y siervas, y he enviado a notificarlo a mi se or, para hallar gracia ante tus ojos''.
Contestó Esaú: 'Quiero al menos dejar contigo parte de la gente que va conmigo'. Replicó Jacob: '¿Para qué? Me basta haber conseguido la benevolencia de mi se or'.
Le preguntó Esaú: '¿Qué es lo que pretendes con toda esa caravana que he encontrado?'. Respondió Jacob: 'Ganarme la benevolencia de mi se or'.
Poned en él los ojos, estad radiantes He y no tengáis los rostros abatidos.
Anda, pues, y come con gozo tu pan y bebe tu vino, porque ya Dios se ha complacido en tu conducta.
Hasta ahora no habéis pedido nada en mi nombre; pedid y recibiréis, y as vuestra alegr a será plena'.
Que el Dios de la esperanza os colme de todo gozo y de paz en vuestra permanencia en la fe, a fin de que reboséis de esperanza por el poder del Esp ritu Santo.
Ella le dijo a su vez: 'Halle yo favor a tus ojos, se or m o, ya que me has consolado y has hablado al corazón de tu sierva, a pesar de no ser yo ni siquiera una de tus criadas'.
Rut, la moabita, dijo a Noem: 'Perm teme ir al campo a recoger espigas tras de aquel a cuyos ojos hallare yo favor'. Ella le respondió: 'Vete, hija m a'.