Andaba Amnón atormentado y a punto de enfermar por amor a Tamar, su hermana, porque, siendo ella virgen, le parec a dif cil a Amnón conseguir nada de ella.
1 Reyes 21:4 - Biblia Castilian 2003 Ajab entró en su casa triste e irritado por la respuesta que le hab a dado Nabot de Yizreel, al decirle: 'No te entregaré la heredad de mis padres'. Se acostó en su lecho, volvió el rostro hacia la pared y no quiso comer. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y vino Acab a su casa triste y enojado, por la palabra que Nabot de Jezreel le había respondido, diciendo: No te daré la heredad de mis padres. Y se acostó en su cama, y volvió su rostro, y no comió. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Acab regresó a su casa enojado y de mal humor por la respuesta de Nabot, y se acostó de cara a la pared y no quiso comer. Biblia Católica (Latinoamericana) Ajab volvió a su casa descorazonado y muy enojado por esa respuesta de Nabot de Jezrael: 'No cederé la herencia de mis padres'. Se acostó en su cama, volvió la cara para la pared y no quería comer. La Biblia Textual 3a Edicion Y Acab se fue a su casa decaído y enfadado a causa de las palabras que le había hablado Nabot jezreelita, pues él le había dicho: ¡No te daré la heredad de mis padres! Y se acostó en su cama, volvió su rostro y no quiso comer pan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ajab entró en su casa triste e irritado por la respuesta que le había dado Nabot de Yizreel, al decirle: 'No te entregaré la heredad de mis padres'. Se acostó en su lecho, volvió el rostro hacia la pared y no quiso comer. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino Acab a su casa, triste y enojado por la palabra que Nabot de Jezreel le había respondido, diciendo: No te daré la heredad de mis padres. Y se acostó en su cama, y volvió su rostro, y no comió pan. |
Andaba Amnón atormentado y a punto de enfermar por amor a Tamar, su hermana, porque, siendo ella virgen, le parec a dif cil a Amnón conseguir nada de ella.
Éste le preguntó: '¿Por qué tú, hijo del rey, estás cada d a más macilento? ¿No me lo vas a descubrir?'. Amnón le respondió: 'Es que estoy enamorado de Tamar, hermana de mi hermano Absalón'.
El rey de Israel se volvió hacia su casa triste e irritado, y entró en Samar a.
Sucedió después que Nabot de Yizreel ten a en Yizreel una vi a junto al palacio de Ajab, rey de Samar a.
Pero Nabot respondió a Ajab: '¡L breme Yahveh de entregarte la heredad de mis padres!'.
Se le acercó su esposa Jezabel y le dijo: '¿Qué te pasa, que estás con aire triste, y no quieres comer?'.
Pero nada me parece todo esto, mientras esté viendo yo al jud o Mardoqueo quedarse sentado a la puerta del rey'.
Más vale ser realista que perderse en cavilaciones. También eso es vanidad y atrapar viento.
Además, Dios dispuso que, al salir el sol, se levantara un viento sofocante; el sol le daba en la cabeza a Jonás y le hac a desfallecer. Entonces se deseó la muerte, diciendo: 'Me es mejor la muerte que la vida'.
Pero Dios respondió a Jonás: '¿Crees que es razonable que te irrites por lo del ricino?'. Él contestó: 'Tengo toda la razón para enojarme hasta desearme la muerte'.
Pero él rehusó diciendo: 'No quiero comer'. Sin embargo, sus servidores, y aun la misma mujer le insistieron, de suerte que accedió a sus ruegos. Se levantó del suelo y se sentó en el diván.