Dijo entonces el rey al varón de Dios: 'Ven conmigo a mi casa para tomar un bocado, y además te haré un regalo'.
1 Reyes 14:3 - Biblia Castilian 2003 Toma contigo diez panes, unas tortas y un tarro de miel, y preséntate a él; que él te dirá lo que va a ser del ni o'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y toma en tu mano diez panes, y tortas, y una vasija de miel, y ve a él, para que te declare lo que ha de ser de este niño. Biblia Nueva Traducción Viviente Llévale de regalo diez hogazas de pan, algunos pasteles y un frasco de miel, y pregúntale qué le sucederá al niño». Biblia Católica (Latinoamericana) Llévate diez panes, tortas y un frasco de miel, entrarás en su casa y él te dirá lo que sucederá con el niño'. La Biblia Textual 3a Edicion Toma en tu mano diez panes, tortas, y una vasija de miel, y ve a él. Te dirá qué será del niño. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Toma contigo diez panes, unas tortas y un tarro de miel, y preséntate a él; que él te dirá lo que va a ser del niño'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y toma en tu mano diez panes, y turrones, y una botija de miel, y ve a él; que te declare lo que ha de ser de este niño. |
Dijo entonces el rey al varón de Dios: 'Ven conmigo a mi casa para tomar un bocado, y además te haré un regalo'.
Ocoz as se cayó desde la baranda de la planta superior de su casa de Samar a y quedó maltrecho. Y envió unos mensajeros a quienes dijo: 'Id a consultar a Baal Zebub, dios de Ecrón, si podré sobrevivir a esta dolencia'.
Llegó después un hombre de Baal Salisá, que tra a en su alforja al varón de Dios pan de primicias: veinte panes de cebada y de trigo nuevo. Y dijo Eliseo: 'Dáselo a la gente para que coma'.
Volvióse entonces al varón de Dios con todo su séquito y, cuando llegó, se detuvo ante él y le dijo: 'Ahora reconozco que no hay más Dios en toda la tierra que el de Israel. Acepta, por favor, un regalo de tu siervo'.
El rey de Aram le contestó: 'Vete, pues, y yo enviaré una carta al rey de Israel'. Se puso en camino, llevando consigo diez talentos de plata, seis mil siclos de oro y diez vestidos.
se le acercó una mujer con un frasco de alabastro, lleno de perfume de mucho valor, y se lo derramó en la cabeza mientras él estaba a la mesa.
Enviaron, pues, las hermanas a decir a Jesús: 'Se or, mira que aquel a quien amas está enfermo'.