Adorán era el jefe de tributos; y Josafat, hijo de Ajilud, era el cronista.
1 Reyes 12:18 - Biblia Castilian 2003 Envió entonces el rey Roboán a Adonirán, supervisor de las levas, pero todo Israel lo lapidó hasta causarle la muerte. Incluso el rey Roboán tuvo que apresurarse a subir al carro para huir a Jerusalén. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y el rey Roboam envió a Adoram, que estaba sobre los tributos; pero lo apedreó todo Israel, y murió. Entonces el rey Roboam se apresuró a subirse en un carro y huir a Jerusalén. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego el rey Roboam envió a Adoniram, quien estaba a cargo del trabajo forzado, a restaurar el orden, pero el pueblo de Israel lo apedreó a muerte. Cuando el rey Roboam se enteró, enseguida subió a su carro de guerra y huyó a Jerusalén. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey Roboam envió a Adoniram, jefe de los trabajadores obligados, pero todo Israel lo recibió con piedras y murió. Roboam tuvo que subir a su carro y huyó a Jerusalén. La Biblia Textual 3a Edicion Después el rey Roboam envió a Adoram,° que estaba a cargo del tributo, pero todo Israel lo apedreó con piedras, de tal modo que murió; y el mismo rey Roboam tuvo que apresurarse a subir en un carro para huir a Jerusalem. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Envió entonces el rey Roboán a Adonirán, supervisor de las levas, pero todo Israel lo lapidó hasta causarle la muerte. Incluso el rey Roboán tuvo que apresurarse a subir al carro para huir a Jerusalén. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey Roboam envió a Adoram, que estaba sobre los tributos; pero le apedreó todo Israel, y murió. Entonces el rey Roboam se apresuró para subir en su carro y huir a Jerusalén. |
Adorán era el jefe de tributos; y Josafat, hijo de Ajilud, era el cronista.
Ajisar, mayordomo de palacio; Adonirán, hijo de Abdá, supervisor de las prestaciones personales.
Acud an para escuchar la sabidur a de Salomón desde todos los pueblos y de parte de todos los reyes de la tierra que hab an o do hablar de su sabidur a.
Envió entonces el rey Roboán a Adonirán, supervisor de las levas, pero todo Israel lo lapidó hasta causarle la muerte. Incluso el rey Roboán tuvo que apresurarse a subir al carro para huir a Jerusalén.
Pero ellos conspiraron contra él y lo lapidaron por orden del rey en el atrio del templo de Yahveh.
Moisés clamó a Yahveh, diciendo: '¿Qué haré yo con este pueblo? ¡Poco falta para que me apedreen!'.
y el más valeroso de los guerreros huirá desnudo aquel d a - oráculo de Yahveh -.
Cuando toda la comunidad hablaba de lapidarlos, apareció la gloria de Yahveh a la vista de todos los israelitas en la tienda del encuentro.
Fue entonces el jefe de la guardia con sus hombres y los condujeron, sin violencia, porque tem an al pueblo, no fueran a apedrearles.