El rey Salomón, además de la hija del Faraón, amó a muchas mujeres extranjeras: moabitas, amonitas, edomitas, sidonias e hititas,
1 Reyes 11:8 - Biblia Castilian 2003 Y lo mismo hizo para complacer a todas sus mujeres extranjeras, que quemaban incienso y ofrec an sacrificios a sus dioses. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así hizo para todas sus mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses. Biblia Nueva Traducción Viviente Salomón construyó esos santuarios para que todas sus esposas extranjeras quemaran incienso e hicieran sacrificios a sus dioses. Biblia Católica (Latinoamericana) Eso hizo para todas sus mujeres extranjeras que ofrecían incienso y sacrificios a sus dioses. La Biblia Textual 3a Edicion Y así hizo para todas sus mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso e inmolaban víctimas a sus dioses. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y lo mismo hizo para complacer a todas sus mujeres extranjeras, que quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y así hizo para todas sus esposas extranjeras, las cuales quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses. |
El rey Salomón, además de la hija del Faraón, amó a muchas mujeres extranjeras: moabitas, amonitas, edomitas, sidonias e hititas,
Fue entonces cuando Salomón edificó, en la colina que está frente a Jerusalén, un altar a Camós, abominación de los moabitas, y otro a Milcón, abominación de los amonitas.
Yahveh se irritó contra Salomón porque éste hab a apartado su corazón de Yahveh, Dios de Israel, que se le hab a aparecido en dos ocasiones
Expulsó del pa s a los hombres dedicados a la prostitución sagrada y quitó todos los dolos que hab an fabricado sus padres.
¿Acaso no fue por esto por lo que pecó Salomón, rey de Israel? Entre tantas naciones, no hubo rey como él. Fue amado de su Dios, y Dios lo constituyó rey de todo Israel. Pero también a él le hicieron pecar las mujeres extranjeras.
S; esta ciudad ha sido para m la causa de mi ira y de mi furor desde el d a en que la construyeron hasta hoy, de modo que tendré que apartarla de mi presencia