sus moradores, faltos de fuerzas, quedaron aterrados y confusos: fueron como hierba del campo, como el verde musgo, como jaramago en los tejados, como mies agostada antes de espigar.
1 Pedro 1:24 - Biblia Castilian 2003 Porque: Todo mortal es hierba y toda su gracia como flor del campo. Se seca la hierba, se marchita la flor, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae; Biblia Nueva Traducción Viviente Como dicen las Escrituras: «Los seres humanos son como la hierba, su belleza es como la flor del campo. La hierba se seca y la flor se marchita. Biblia Católica (Latinoamericana) Pues toda carne es como hierba y su gloria como flor del campo. La hierba se seca y la flor se cae, La Biblia Textual 3a Edicion Pues: Toda carne es como hierba, Y toda su° gloria como la flor de la hierba. Sécase la hierba, y cae la flor; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque: Todo mortal es hierba y toda su gracia como flor del campo. Se seca la hierba, se marchita la flor, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque toda carne es como la hierba, y toda la gloria del hombre como la flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae; |
sus moradores, faltos de fuerzas, quedaron aterrados y confusos: fueron como hierba del campo, como el verde musgo, como jaramago en los tejados, como mies agostada antes de espigar.
Mis d as se terminan en humo, y mis huesos se queman lo mismo que un brasero.
El hombre: como la hierba son sus d as, como la flor del campo, as su florecer.
pues presto como el heno languidecen y como la hierba verde se marchitan.
Mira: hiciste mis d as de unos palmos, mi existencia ante ti, como una nada: en total no es más que un soplo cuanto el hombre subsiste. Selah
Tú los haces pasar y son un sue o, o como la hierba que nace con el alba,
Yo, yo soy quien os consuela. ¿Quién eres tú para que temas al hombre que muere, al hijo de hombre que como hierba es tratado?
Pues si a la hierba del campo, que hoy existe y ma ana se echa al horno, Dios la viste as, ¿no hará mucho más por vosotros, hombres de poca fe?
¡Vosotros, precisamente, que no sabéis cómo será ma ana vuestra vida! Sois vaho que un momento aparece y al punto se disipa.
Y el mundo pasa; y sus deseos. Pero quien hace la voluntad de Dios permanece para siempre.