Elijóref y Aj as, hijos de Sisá, secretarios; Josafat, hijo de Ajilud, cronista;
1 Crónicas 24:6 - Biblia Castilian 2003 Sema as, hijo de Natanael, escriba, de la tribu de Lev, los inscribió en presencia del rey, de los pr ncipes, del sacerdote Sadoc, de Ajimélec, hijo de Abiatar, y de los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y de los levitas. Se sacaba para Eleazar una suerte y luego otra; y para Itamar, una sola suerte. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y el escriba Semaías hijo de Natanael, de los levitas, escribió sus nombres en presencia del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, de Ahimelec hijo de Abiatar y de los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y levitas, designando por suerte una casa paterna para Eleazar, y otra para Itamar. Biblia Nueva Traducción Viviente Semaías, hijo de Natanael, un levita, actuó como secretario y anotó los nombres y las responsabilidades en la presencia del rey, de los oficiales, del sacerdote Sadoc, de Ahimelec —hijo de Abiatar—, y de los jefes de familia de los sacerdotes y de los levitas. Los descendientes de Eleazar y de Itamar se turnaban para echar suertes. Biblia Católica (Latinoamericana) Semaías, hijo de Natanael, escriba, uno de los levitas, los inscribió en presencia del rey y de los jefes, y en presencia del sacerdote Sadoc, de Ajimelec, hijo de Abiatar, y de los jefes de familias sacerdotales y levíticas. Se sacaba a suertes: una vez para Itamar y dos veces para Eleazar. La Biblia Textual 3a Edicion Y el escriba Semaías ben Natanael, de los levitas, escribió sus nombres en presencia del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, de Ahimelec ben Abiatar y de los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y levitas, designando por sorteo una casa paterna para Eleazar y otra para Itamar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Semaías, hijo de Natanael, escriba, de la tribu de Leví, los inscribió en presencia del rey, de los príncipes, del sacerdote Sadoc, de Ajimélec, hijo de Abiatar, y de los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y de los levitas. Se sacaba para Eleazar una suerte y luego otra; y para Itamar, una sola suerte. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Semaías, el hijo del escriba Natanael, uno de los levitas, los inscribió delante del rey y de los príncipes, y del sacerdote Sadoc, y de Ahimelec, hijo de Abiatar, y delante de los jefes de las familias de los sacerdotes y levitas: y asignó una casa principal para Eleazar, y otra para Itamar. |
Elijóref y Aj as, hijos de Sisá, secretarios; Josafat, hijo de Ajilud, cronista;
Sadoc, hijo de Ajitub, y Abiatar, hijo de Ajimélec, eran sacerdotes, Sausá era el secretario;
Éstos eran los hijos de Lev, según sus casas paternas, los jefes de familia según su censo, contados nominalmente uno por uno, que estaban dedicados al servicio del templo de Yahveh desde los veinte a os en adelante.
También éstos entraron en suerte, como sus hermanos, los hijos de Aarón, ante el rey David, Sadoc, Ajimélec y los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y de los levitas. El jefe de una casa paterna entró en suerte lo mismo que su hermano menor.
Éstos estaban también al frente de los acarreadores y dirig an a todos los trabajadores ocupados en las distintas tareas. Hab a, además, levitas que eran escribas, inspectores y porteros.
subió de Babilonia. Esdras era un escriba versado en la ley que Yahveh, Dios de Israel, hab a dado a Moisés. Y como la mano de Yahveh, su Dios, estaba con él, el rey le concedió todo cuanto le hab a pedido.
Entonces todo el pueblo, como un solo hombre, se congregó en la plaza que hay frente a la puerta de las Aguas y dijeron a Esdras, el escriba, que trajera el libro de la ley de Moisés que Yahveh hab a impuesto a Israel.
Entonces les dijo: 'Por eso todo escriba convertido en disc pulo del reino de los cielos se parece a un due o de casa que saca de su almacén lo nuevo y lo viejo'.
Se le acercó un escriba para decirle: 'Maestro, te seguiré adondequiera que vayas'.
que entró en la casa de Dios, en tiempos del pont fice Abiatar, y comió los panes ofrecidos a Dios, los que sólo a los sacerdotes es l cito comer, y los repartió también entre sus compa eros?'.