Tomó David nuevas concubinas y mujeres en Jerusalén después de venir de Hebrón, y le nacieron más hijos e hijas.
1 Crónicas 14:3 - Biblia Castilian 2003 Tomó luego más mujeres en Jerusalén y engendró más hijos e hijas. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces David tomó también mujeres en Jerusalén, y engendró David más hijos e hijas. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego David se casó con varias mujeres más en Jerusalén, y ellas tuvieron más hijos e hijas. Biblia Católica (Latinoamericana) David tomó por esposas otras mujeres en Jerusalén y tuvo más hijos e hijas. La Biblia Textual 3a Edicion Y David tomó más mujeres en Jerusalem, y engendró David más hijos e hijas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tomó luego más mujeres en Jerusalén y engendró más hijos e hijas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces David tomó más esposas en Jerusalén y engendró David más hijos e hijas. |
Tomó David nuevas concubinas y mujeres en Jerusalén después de venir de Hebrón, y le nacieron más hijos e hijas.
Llegó a tener setecientas princesas por esposas y trescientas concubinas. Sus mujeres pervirtieron su corazón.
Conoció as David que Yahveh lo hab a confirmado por rey de Israel y que hab a exaltado su reino a causa de su pueblo Israel.
He aqu los nombres de los que le nacieron en Jerusalén: Samúa, Sobab, Natán y Salomón,
Y de entre todos mis hijos - pues fueron muchos los que me concedió Yahveh -, eligió a mi hijo Salomón para que se siente en el trono del reino de Yahveh sobre Israel.
Goza de la vida con la mujer que amas durante todos los d as de la vana existencia que Dios te concede bajo el sol, porque tal es tu suerte en la vida y en las fatigas que te tomas bajo el sol.
Vosotros preguntáis: '¿Por qué?'. Porque Yahveh es testigo entre ti y la esposa de tu juventud, a la cual has traicionado, a pesar de ser tu compa era y la mujer de tu alianza.
Él les contesta: 'Moisés, en atención a la dureza de vuestro corazón, os permitió despedir a vuestras mujeres. Pero no fue as desde el principio.
No ha de tener muchas mujeres, para que no se descarr e su corazón; ni amontonará plata y oro en exceso.