1 Corintios 4:6 - Biblia Castilian 2003 En atención a vosotros, hermanos, he aplicado estas cosas, como ejemplo, a mi propio caso y al de Apolo, para que de nosotros aprendáis lo de: 'No más de lo que está escrito', a fin de que no os infléis de vanidad, tomando partido por uno y contra otro. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero esto, hermanos, lo he presentado como ejemplo en mí y en Apolos por amor de vosotros, para que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros. Biblia Nueva Traducción Viviente Amados hermanos, puse el caso de Apolos y el mío propio como ilustración de lo que les vengo diciendo. Si prestan atención a lo que les cité de las Escrituras, no estarán orgullosos de uno de sus líderes a costa de otro. Biblia Católica (Latinoamericana) Con estas comparaciones, hermanos, me refería a Apolo y a mí. Aprendan a no valerse de uno a costa del otro para engreirse. La Biblia Textual 3a Edicion Pero estas cosas, hermanos, las he aplicado en figuras a mí y a Apolos, por causa de vosotros, para que en nosotros aprendáis lo de no sobrepasar lo que está escrito, para que ninguno de vosotros se vuelva° arrogante a favor del uno contra el otro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 En atención a vosotros, hermanos, he aplicado estas cosas, como ejemplo, a mi propio caso y al de Apolo, para que de nosotros aprendáis lo de: 'No más de lo que está escrito', a fin de que no os infléis de vanidad, tomando partido por uno y contra otro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero esto, hermanos, lo he transferido por ejemplo en mí y en Apolos por amor a vosotros; para que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito, para que ninguno de vosotros se envanezca, por causa de uno contra otro. |
Cuando miro los cielos hechura de tus manos, la luna y las estrellas que tú has establecido
Dejaos del hombre en cuya nariz apenas hay un soplo; pues, ¿en qué puede estimársele?
Llegó a Éfeso un jud o, por nombre Apolo, alejandrino de origen, hombre elocuente y versado en las Escrituras.
Mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones altas, llegó a Éfeso y encontró algunos disc pulos,
En virtud de la gracia que me ha sido otorgada, digo, pues, a cada uno de vosotros: que nadie tenga de s mismo estimación superior a la que debe tener, sino que se estime con la debida moderación, según la medida de fe que Dios ha concedido a cada uno.
Me refiero a que cada uno de vosotros dice: 'Yo soy de Pablo'; 'Yo de Apolo'; 'Yo de Cefas'; 'Yo de Cristo'.
Porque escrito está: Destruiré la sabidur a de los sabios, y anularé la inteligencia de los entendidos.
Y as, según está escrito: Quien quiera ufanarse, que se ufane en el Se or.
El amor es paciente, el amor es benigno; no tiene envidia; no presume ni se engr e;
pues la sabidur a de este mundo es necedad para Dios. Porque está escrito: Él atrapa a los sabios en su propia astucia.
¡Y todav a continuáis inflados de orgullo! ¿No deber ais más bien haberlo lamentado y haber expulsado de entre vosotros al que ha cometido semejante acción?
¡No está bien esa jactancia vuestra! ¿No sabéis que un poco de levadura hace fermentar toda la masa?
Todos tenemos conocimiento acerca de la carne inmolada a los dolos. Pero el conocimiento infla, mientras que el amor construye.
No nos atrevemos ciertamente a equipararnos o a compararnos con algunos que tanto se recomiendan a s mismos. Sin embargo, cuando a s mismos se toman entre s como medida y se comparan consigo mismos, no obran sabiamente.
Nuestra jactancia no nos lleva a traspasar la medida aprovechándonos de trabajos ajenos; por el contrario, tenemos esperanza de que, creciendo la fe entre vosotros, creceremos hasta el desbordamiento de nuestra medida,
Veis las cosas según las apariencias. Si alguno cree que es de Cristo, piense también esto para s: que como él es de Cristo, también lo somos nosotros.
Porque si uno viene y proclama otro Jesús distinto del que hemos proclamado, o aceptáis otro Esp ritu distinto del que habéis aceptado, u otro evangelio distinto del que habéis recibido, lo toleráis bien.
¿Estáis pensando desde hace tiempo que nos estamos defendiendo ante vosotros? ¡Es ante Dios, en Cristo, como estamos hablando! Y todo, amados m os, para edificación vuestra.
Porque temo que quizás, al llegar, no os encuentre tales como yo quisiera, y que vosotros me encontréis a m tal como no querr ais: que tal vez haya discordia, envidia, enconos, rivalidades, calumnias, murmuraciones, arrogancias, desórdenes;
Y si quisiera gloriarme, no ser a insensato, porque dir a la verdad. Pero me abstengo, para que nadie me estime en más de lo que en m ve u oye,
Todo esto es por vosotros, a fin de que cuanto mayor sera el número de los que reciben la gracia, mayor sea el agradecimiento para gloria de Dios.
Que nadie os anule el premio apelando a la mortificación y al culto de los ángeles, intentando comprender el sentido de las visiones que cree haber tenido y tontamente hinchado por sus pensamientos humanos,
porque nuestro evangelio no llegó a vosotros sólo con palabras, sino, además, con poder, con el Esp ritu Santo y con profunda convicción. Como muy bien sabéis, ésa fue nuestra actuación entre vosotros, para bien vuestro.
Por eso, todo lo sufro por amor a los elegidos, para que también ellos alcancen la salvación que está en Cristo Jesús con gloria eterna.