con tu mano, Se or, de los mortales: de los muertos del mundo, con su parte en la vida, cuyo vientre se llena en tus reservas: ah tanse los hijos, y dejan lo restante a sus peque os.
1 Corintios 15:19 - Biblia Castilian 2003 Si nuestra esperanza en Cristo sólo es para esta vida, somos los más desgraciados de todos los hombres. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres. Biblia Nueva Traducción Viviente Y si nuestra esperanza en Cristo es solo para esta vida, somos los más dignos de lástima de todo el mundo. Biblia Católica (Latinoamericana) Si nuestra esperanza en Cristo se termina con la vida presente, somos los más infelices de todos los hombres. La Biblia Textual 3a Edicion Si solamente para esta vida esperamos en el Mesías, somos los más dignos de lástima de todos los hombres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si nuestra esperanza en Cristo sólo es para esta vida, somos los más desgraciados de todos los hombres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si sólo en esta vida esperamos en Cristo, somos los más miserables de todos los hombres. |
con tu mano, Se or, de los mortales: de los muertos del mundo, con su parte en la vida, cuyo vientre se llena en tus reservas: ah tanse los hijos, y dejan lo restante a sus peque os.
Donde hay muchas palabras hay mucha vanidad; y el hombre, ¿qué gana con ello?
Goza de la vida con la mujer que amas durante todos los d as de la vana existencia que Dios te concede bajo el sol, porque tal es tu suerte en la vida y en las fatigas que te tomas bajo el sol.
Entonces os entregarán al tormento y os matarán y seréis odiados por todos los pueblos a causa de mi nombre.
Tened cuidado de vosotros mismos, no sea que vuestro corazón se embote por la crápula, la embriaguez y las preocupaciones de la vida, y caiga de improviso sobre vosotros aquel d a
Lo que cayó entre zarzas son los que oyeron; pero con las preocupaciones y las riquezas y los placeres de la vida, se van ahogando y no llegan a madurar.
Os echarán de las sinagogas; más aún, llega la hora en que todo aquel que os mate creerá dar culto a Dios.
Os he dicho esto, para que en m tengáis paz. En el mundo tendréis tribulación; pero tened buen ánimo: yo he vencido al mundo'.
confortando a los disc pulos y exhortándolos a permanecer en la fe, diciéndoles que por muchas tribulaciones tenemos que pasar para entrar en el reino de Dios.
ante Dios, nuestro Padre, recordamos la actividad de vuestra fe, el esfuerzo de vuestro amor y la constancia de vuestra esperanza en nuestro Se or Jesucristo.
Por esta misma causa soporto yo mi situación actual. Pero no me avergüenzo, porque sé perfectamente de quién me he fiado, y estoy seguro del poder que tiene para guardar hasta aquel d a el depósito que se me confió.
El hombre que se alista en la milicia no se enreda en los negocios civiles si quiere complacer al que lo ha reclutado.
Todos los que quieran vivir religiosamente en Cristo Jesús sufrirán persecuciones.
los que por él creéis en Dios, que lo resucitó de entre los muertos y le dio la gloria, de modo que vuestra fe y esperanza estén puestas en Dios.
Y o una voz del cielo que dec a: 'Escribe: 'Dichosos ya desde ahora los que mueren en el Se or'. S, dice el Esp ritu, que descansen de sus fatigas, pues sus obras los acompa an'.