Dediquémonos, por consiguiente, a lo que fomenta la paz y favorece la edificación común.
1 Corintios 14:12 - Biblia Castilian 2003 As también vosotros. Ya que aspiráis con ardor a los dones del Esp ritu, procurad tenerlos en abundancia para la edificación de la iglesia. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia. Biblia Nueva Traducción Viviente Lo mismo ocurre con ustedes. Ya que están tan deseosos de tener las capacidades especiales que da el Espíritu, procuren las que fortalecerán a toda la iglesia. Biblia Católica (Latinoamericana) Tomen esto en cuenta, y si se interesan por los dones espirituales, ansíen los que edifican la Iglesia. Así no les faltará nada. La Biblia Textual 3a Edicion Así también vosotros, puesto que anheláis dones espirituales,° procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Así también vosotros. Ya que aspiráis con ardor a los dones del Espíritu, procurad tenerlos en abundancia para la edificación de la iglesia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para la edificación de la iglesia. |
Dediquémonos, por consiguiente, a lo que fomenta la paz y favorece la edificación común.
¡Aspirad a los dones superiores! Os voy a mostrar un camino todav a mucho más excelente.
Procurad conseguir el amor; pero aspirad también a los dones del Esp ritu, sobre todo al de profec a.
Por eso, el que habla lenguas, ore para que se le conceda la interpretación.
¿Qué conclusión sacar, hermanos? Cuando os reun s, cada uno puede tener un himno, una ense anza, una revelación, un lenguaje, una interpretación: que todo sirva para edificación.
Yo quisiera que todos hablaseis lenguas, pero mucho más que profetizarais. El que profetiza es más que el que habla lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación.
el cual se entregó por nosotros, para rescatarnos de toda iniquidad y para purificarnos, haciendo de nosotros un pueblo que fuera su patrimonio, dedicado a buenas obras.