A la mujer le dijo: 'Multiplicaré los sufrimientos de tus embarazos; darás a luz hijos con dolor. Ansiarás a tu marido y el te dominará'.
1 Corintios 11:3 - Biblia Castilian 2003 Pero quisiera que comprendierais esto: la cabeza de todo varón es Cristo; la cabeza de la mujer es el varón; y la cabeza de Cristo es Dios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero hay algo que quiero que sepan: la cabeza de todo hombre es Cristo, la cabeza de la mujer es el hombre, y la cabeza de Cristo es Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero quiero recordarles que la cabeza de todo varón es Cristo, y la cabeza de la mujer es el varón, y la cabeza de Cristo es Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Pero quiero que sepáis que la cabeza de todo varón es el Mesías, y la cabeza de la mujer es el varón, y la cabeza del Mesías es Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero quisiera que comprendierais esto: la cabeza de todo varón es Cristo; la cabeza de la mujer es el varón; y la cabeza de Cristo es Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón; y el varón es la cabeza de la mujer; y Dios la cabeza de Cristo. |
A la mujer le dijo: 'Multiplicaré los sufrimientos de tus embarazos; darás a luz hijos con dolor. Ansiarás a tu marido y el te dominará'.
Mira: testigo para los clanes lo hice, caudillo y soberano de los pueblos.
Y acercándose Jesús a ellos, les habló as: 'Se me ha dado todo poder en el cielo y en la tierra.
Ya habéis o do lo que os dije: me voy, pero volveré a vosotros. Si me amarais, os alegrar ais de que voy al Padre, porque el Padre es mayor que yo.
sino que, profesando la verdad en amor, crezcamos en todos sentidos hacia él, que es la cabeza, Cristo,
Él es la cabeza del cuerpo, de la Iglesia; él, que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que as él tenga primac a en todo:
Y vosotros habéis sido llenados en él, que es la cabeza de todo principado y potestad,
y no permaneciendo unido a la cabeza, de la cual todo el cuerpo, por medio de junturas y articulaciones, recibe alimento y cohesión para su crecimiento de Dios.
Asimismo, vosotras, mujeres, sed sumisas a vuestros maridos, para que si algunos se muestran rebeldes a la palabra, sin palabra alguna sean conquistados por la conducta de las mujeres,