Jesús andaba recorriendo toda Galilea. Enseñaba en las sinagogas de los judíos, predicaba las buenas noticias del Reino de Dios y sanaba a los enfermos que había entre el6 pueblo, cualesquiera que fueran sus dolencias.
Lucas 4:43 - Biblia Castellano Antiguo (Nuevo Testamento) Pero Jesús les dijo:
Es necesario que vaya a otros lugares, a anunciar también en ellos las buenas noticias del reino de Dios. Precisamente para eso he sido enviado. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado. Biblia Nueva Traducción Viviente Él les respondió: «Debo predicar la Buena Noticia del reino de Dios también en otras ciudades, porque para eso fui enviado». Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Jesús les dijo: 'Yo tengo que anunciar también a las otras ciudades la Buena Nueva del Reino de Dios, porque para eso he sido enviado. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Él les dijo: Es necesario que proclame las buenas nuevas del reino de Dios también a las otras ciudades, pues para esto fui enviado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero él les dijo: 'También a otras ciudades tengo que anunciar el evangelio del reino de Dios, pues para esto he sido enviado'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades yo predique el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado. |
Jesús andaba recorriendo toda Galilea. Enseñaba en las sinagogas de los judíos, predicaba las buenas noticias del Reino de Dios y sanaba a los enfermos que había entre el6 pueblo, cualesquiera que fueran sus dolencias.
A la mañana siguiente, estando todavía muy oscuro, se levantó y se fue a un lugar desierto, a orar a solas.
En cuanto a mí, mientras dura la luz del día me es necesario llevar a cabo las obras que me señaló el que me ha enviado, porque luego viene la noche, cuando ya nadie puede trabajar.
Y, sin duda, también sabéis que Dios ungió con el Espíritu Santo y dotó con su propia autoridad a Jesús de Nazaret, el cual anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que padecen bajo la opresión del diablo, porque Dios estaba con él.
que prediques la palabra de Dios, insistiendo en ella a tiempo y a destiempo. Argumenta para convencer, reprende si es necesario y exhorta con toda paciencia,