Ezequiel 1:2 - La Biblia Textual 3a Edicion

² A los cinco días del mes, el año quinto de la deportación del rey Joaquín,

Tuilleadh tionndaidhean

Biblia Reina Valera 1960

² En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes,

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Eso ocurrió durante el quinto año de cautividad del rey Joaquín.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² El día quinto del mes, el año quinto de la deportación del rey Joaquim,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² El día cinco del mes -era el año quinto de la deportación del rey Jeconías-,

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

² En el quinto día del mes, que fue en el quinto año de la cautividad del rey Joaquín,

Ezequiel 1:2 Iomraidhean Croise

Ezequiel 40:1

En el año vigésimo quinto de nuestro cautiverio, al principio del año, a los diez días del mes; catorce años después que la ciudad había sido conquistada, en aquel mismo día, vino sobre mí la mano de YHVH, y me llevó allá.

Ezequiel 20:1

En el año séptimo, en el mes quinto, a los diez días del mes, aconteció que algunos de los ancianos de Israel vinieron a consultar a YHVH, y se sentaron delante de mí.

Ezequiel 29:17

En el año vigésimo séptimo, en el mes primero, el día primero del mes, vino a mí palabra de YHVH, diciendo:

Ezequiel 8:1

El año sexto, el día cinco del mes sexto, estando yo sentado en mi casa, y los ancianos de Judá sentados frente a mí, la mano de Adonay YHVH bajó allí sobre mí.

Ezequiel 31:1

En el año undécimo, en el mes tercero, el día primero del mes, aconteció que vino a mí palabra de YHVH, diciendo:

Ezequiel 29:1

En el año décimo, en el mes décimo, a los doce días del mes, vino a mí palabra de YHVH, diciendo:

Ezequiel 17:12

Di ahora a la casa rebelde: ¿No sabéis qué significa esto? Diles: El rey de Babilonia vino a Jerusalem, Y apresando a su rey y a sus príncipes, Los llevó consigo a Babilonia.

Ezequiel 33:21

En el año duodécimo de nuestro cautiverio, en el mes décimo, a los cinco días del mes, aconteció que vino a mí uno que había escapado de Jerusalem, el cual decía: ¡La ciudad ha sido conquistada!