Proverbios 11:23 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

²³ Los deseos de los justos terminan bien; la esperanza de los malvados termina mal.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

²³ El deseo de los justos es solamente el bien; Mas la esperanza de los impíos es el enojo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²³ Los justos pueden esperar una recompensa, mientras que a los perversos solo les espera juicio.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²³ Los justos no desean sino el bien, los malos también tienen sus esperanzas, pero van al fracaso.

La Biblia Textual 3a Edicion

²³ El anhelo de los justos es sólo el bien, Pero la expectativa de los impíos es la ira.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²³ El deseo de los justos tiende al bien; a los malvados les aguarda la cólera.

Proverbios 11:23 Tagairtí Cros

Salmos 10:17

Señor, tú conoces el anhelo de los desvalidos. Ciertamente escucharás sus clamores y los consolarás.

Salmos 119:10

Me he esforzado cuanto he podido por hallarte: no permitas que me desvíe de tus mandamientos.

Salmos 119:5

¡Que se puedan ver tus leyes en lo que yo hago!

Salmos 27:4

Lo que pido de Dios, lo que más deseo, es el privilegio de meditar en su templo, vivir en su presencia cada día de mi vida y deleitarme en su perfección y gloria.

Salmos 37:4

Deléitate en el Señor. Así él te dará lo que tu corazón anhela.

Proverbios 10:28

En el futuro de los justos hay felicidad, pero el de los malvados está vacío.

Proverbios 11:24

El que da en abundancia, recibe más de lo que dio; pero el que es tacaño, termina en la pobreza.

Proverbios 11:7

Cuando muere el malvado, todas sus esperanzas e ilusiones de poder, mueren con él.

Proverbios 12:5

Los planes del justo son buenos, pero en el consejo del malvado hay engaño.

Proverbios 13:2

El que habla el bien, cosechará el bien, pero los traidores tienen hambre de violencia.

Isaías 26:9

Toda la noche te busco; busco a Dios con todo fervor; sólo cuando vengas a juzgar la tierra y a castigarla, el pueblo se apartará de su maldad y hará lo que es justo.

Jeremías 17:16

Señor, no quiero que alguna terrible calamidad caiga sobre tu pueblo. Tuyo y no mío es el plan, tuyo y no mío es el mensaje que les doy. ¡No soy yo quien quiere su condena!

Mateo 5:6

¡Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque quedarán satisfechos!

Hebreos 10:27

Lo único que nos queda es esperar con terror el juicio, el fuego ardiente con el que Dios destruirá a sus enemigos.