Números 23:27 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

²⁷ ―Yo te llevaré a otro lugar —le dijo el rey—. Quizá desde allí el Señor quiera que los maldigas.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

²⁷ Y dijo Balac a Balaam: Te ruego que vengas, te llevaré a otro lugar; por ventura parecerá bien a Dios que desde allí me lo maldigas.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁷ Entonces el rey Balac le dijo a Balaam: —Ven, te llevaré a un lugar más. Quizá esto agrade a Dios y te permita maldecirlos desde allí.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁷ Balac le dijo a Balaam: 'Ven, te llevaré a otra parte, y a lo mejor allí tu Dios estará de acuerdo en que me lo maldigas!'

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁷ Entonces Balac dijo a Balaam: ¡Ven te ruego, te llevaré a otro lugar! ¡Quizá plazca a los ojos de Dios que me los maldigas desde allí!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁷ Balac dijo a Balaán: 'Ven, pues, y te llevaré a otro sitio; quizá a Dios le parezca bien que me los maldigas desde allí'.

Números 23:27 Tagairtí Cros

Job 23:13

»Sin embargo, su intención respecto a mí sigue invariable, ¿y quién podrá apartarlo de sus propósitos? Lo que él quiere, eso hace.

Proverbios 19:21

El hombre puede hacer muchos planes, pero la decisión final es del Señor.

Proverbios 21:30

Nadie, por inteligente o sabio que sea, puede enfrentarse al Señor.

Isaías 14:27

El Señor, el Dios de la batalla, ha hablado; ¿quién podrá cambiar sus planes? Cuando su mano se mueve, ¿quién puede detenerlo?

Malaquías 3:6

»Porque yo, el Señor, no cambio. Por esta razón ustedes no han sido completamente destruidos, porque mi misericordia dura para siempre, aunque ustedes sean tan volubles.

Números 23:13

Entonces Balac le dijo: ―Ven conmigo a otro lugar. Allí sólo verás una parte del pueblo de Israel. Maldice por lo menos a esa parte.

Números 23:26

Pero Balán contestó: ―¿No te dije que yo tengo que decir lo que el Señor me diga?

Números 23:28

Lo llevó a la cumbre del monte Peor, que domina el desierto.

Romanos 11:29

Dios jamás retira sus dádivas ni se olvida de aquellos a quienes ha elegido.