Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Mateo 27:29 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

29 A alguien se le ocurrió ponerle una corona de espinas y una vara en la mano derecha a manera de cetro. Burlones, se arrodillaban ante él. ―¡Viva el Rey de los judíos! —gritaban.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

29 y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

29 Armaron una corona con ramas de espinos y se la pusieron en la cabeza y le colocaron una caña de junco en la mano derecha como si fuera un cetro. Luego se arrodillaron burlonamente delante de él mientras se mofaban: «¡Viva el rey de los judíos!».

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

29 Después le colocaron en la cabeza una corona que habían trenzado con espinos y en la mano derecha le pusieron una caña. Doblaban la rodilla ante Jesús y se burlaban de él, diciendo: '¡Viva el rey de los judíos!'

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

29 Y trenzaron una corona° de espinas y la colocaron sobre su cabeza, y pusieron una caña en su diestra; y arrodillándose ante Él, se burlaron, diciendo: ¡Salve,° rey de los judíos!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

29 Luego, le pusieron en la cabeza una corona que habían entretejido con espinas, y en la mano derecha una caña. Y doblando ante él la rodilla, se burlaban, diciendo: '¡Salve, rey de los judíos!'.

Féach an chaibidil Cóip




Mateo 27:29
14 Tagairtí Cros  

aunque por tu causa sea yo objeto de maldición y mofa.


El Señor, el Redentor y Santo de Israel dice a aquel que es despreciado, rechazado de la humanidad y que yace bajo la planta de los gobernantes del mundo: Los reyes se mantendrán reverentes cuando tú pases, los príncipes te harán profunda reverencia porque el Señor te ha elegido y cumplirá lo que promete.


Todos lo despreciaron y lo rechazaron. Fue un hombre marcado por el dolor y habituado al más amargo sufrimiento. Todos evitábamos mirarlo, lo ignorábamos y lo considerábamos como harapo pisoteado en el camino.


Entonces dije: ¡Oh Señor, me sedujiste y no puse resistencia! Me veo forzado a darles tus mensajes porque tú eres más fuerte que yo, pero ahora soy el hazmerreír de la ciudad, todo el mundo se burla de mí.


Luego me entregarán a los romanos, para que se burlen de mí y me crucifiquen. Pero al tercer día resucitaré».


Sin pérdida de tiempo, el traidor se acercó a Jesús. ―Hola, Maestro —le dijo, y lo besó.


En la cruz, por encima de la cabeza de Jesús, habían puesto un letrero que decía: «este es jesús, el rey de los judíos».


Le pusieron un manto de color púrpura; también trenzaron una corona de espinas y se la pusieron.


Y le gritaban: ―¡Viva el rey de los judíos!


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí