Malaquías 3:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

⁶ »Porque yo, el Señor, no cambio. Por esta razón ustedes no han sido completamente destruidos, porque mi misericordia dura para siempre, aunque ustedes sean tan volubles.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

⁶ Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ «Yo soy el Señor y no cambio. Por eso ustedes, descendientes de Jacob, aún no han sido destruidos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Porque yo, Yavé, en nada he cambiado; igual que ustedes, hijos de Jacob que todavía no terminan...

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ Porque Yo, YHVH, no cambio. Por eso vosotros, oh hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Yo, Yahveh, no he cambiado; pero vosotros, hijos de Jacob, no cesáis de cambiar.

Malaquías 3:6 Tagairtí Cros

Génesis 15:18

Ese día el Señor hizo un pacto con Abram, y le dijo: ―A tus descendientes les voy a dar toda la tierra que va desde el río de Egipto hasta el gran río, es decir, el río Éufrates.

Génesis 15:7

Y le dijo: ―Yo soy el Señor que te saqué de la ciudad de Ur de los caldeos, para regalarte esta tierra.

Génesis 22:16

y le dijo: ―Ya que me obedeciste y no me negaste a tu único hijo, juro por mí mismo —lo digo yo, el Señor—, que

Salmos 102:26

Ellos perecerán, pero tú permanecerás para siempre. Ellos se desgastarán como vestiduras viejas, y tú como ropa los cambiarás, y los dejarás a un lado.

Salmos 102:27

Pero tú eres siempre el mismo, y tus años no tienen fin.

Salmos 102:28

Los hijos de tus siervos vivirán seguros, y sus descendientes prosperarán en tu presencia».

Salmos 103:17

Pero el amor del Señor permanece para siempre con aquellos que le temen. Su salvación está con los hijos de sus hijos,

Salmos 78:38

Pero él fue misericordioso; les perdonaba sus pecados y no los destruía. Una y otra vez contuvo su ira.

Salmos 78:57

Fueron desleales y traidores, como sus padres; ¡tan falsos como un arco defectuoso!

Isaías 41:13

Yo te sostengo tomándote de la mano derecha —yo, el Señor Dios tuyo— y te digo: ¡No tengas temor; estoy aquí para ayudarte!

Isaías 44:6

El Señor, el Rey de Israel dice, sí, el Redentor de Israel, el Señor Todopoderoso es quien lo dice: Yo soy el primero y el último, no hay otro Dios.

Isaías 46:4

Yo seré su Dios en toda su vida. Sí, hasta que su cabello se encanezca por la edad. Yo los hice y yo los cuidaré, los llevaré en mis manos y seré su Salvador.

Jeremías 32:27

Yo soy el Señor, el Dios de toda la humanidad. ¿Hay para mí algo demasiado difícil?

Daniel 6:26

Ordeno que en todo mi reino todos teman y tiemblen ante el Dios de Daniel. Pues su Dios es el Dios vivo, que no cambia, cuyo reino jamás será destruido y cuyo poder jamás se acabará.

Oseas 11:9

No dejaré que mi cólera se desate contra Efraín y lo destruya, pues yo soy Dios y no un hombre. Yo soy el Santo que vivo entre ustedes, y no he venido para destruirte».

Habacuc 1:12

Señor, Dios mío, tú eres eterno. Tú, mi Dios santo, no nos dejarás perecer. Yo sé, Señor, que usarás a los babilonios para obrar tu justicia. Tú, Roca mía, los has hecho surgir con mucho poder para castigar nuestro pecado.

Números 23:19

Dios no es hombre para que mienta; él no se arrepiente como los hombres. ¿Ha prometido alguna vez sin cumplir lo que ha dicho?

Romanos 5:10

Pues si cuando éramos enemigos nos reconcilió con él mismo por la muerte de su Hijo, ¡cómo no ha de salvarnos ahora por su vida!

Filipenses 1:6

El que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el día en que Jesucristo regrese. De esto estoy seguro.

Hebreos 13:8

Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los siglos.

Hebreos 6:18

De estas dos cosas que no pueden cambiarse y en las que es imposible que Dios mienta, recibimos un gran consuelo los que ahora acudimos a él en busca de su protección y confiados en la esperanza que nos ha dado.

Santiago 1:17

De lo alto nos viene todo lo bueno y perfecto. Allí es donde está el Padre que creó todos los astros del cielo, y que no cambia como las sombras.

Apocalipsis 1:8

«Yo soy la A y la Z, —dice el Señor Dios—, el que es, que era y que ha de venir, el Todopoderoso».

Apocalipsis 22:13

Yo soy la A y la Z, el principio y el fin, el primero y el último.

1 Samuel 15:29

Y el Señor, que es la Gloria de Israel, no miente, ni cambia de parecer, porque no es como los hombres.