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Juan 18:33 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

33 Pilato volvió a entrar al palacio y llamó a Jesús. Le preguntó: ―¿Eres tú el rey de los judíos?

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Biblia Reina Valera 1960

33 Entonces Pilato volvió a entrar en el pretorio, y llamó a Jesús y le dijo: ¿Eres tú el Rey de los judíos?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

33 Entonces Pilato volvió a entrar en su residencia y pidió que le trajeran a Jesús. —¿Eres tú el rey de los judíos? —le preguntó.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

33 Pilato volvió a entrar en el palacio, llamó a Jesús y le preguntó: '¿Eres tú el Rey de los judíos?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

33 Entonces entró Pilato otra vez en el pretorio, y llamó a Jesús y le dijo: ¿Eres tú el rey de los judíos?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

33 Entró, pues, Pilato nuevamente en el pretorio, llamó a Jesús y le dijo: '¿Eres tú el rey de los judíos?'.

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Juan 18:33
25 Tagairtí Cros  

Porque llegará un día, dice el Señor, en que pondré como rey en el trono del rey David una Rama justa. Será un Rey que gobierne con sabiduría y rectitud, que hará que la justicia sea la norma de todas las personas en la tierra.


Porque el Señor no te castigará como lo había dicho, sino más bien alejará de ti los ejércitos de tus enemigos y los dispersará. Y el Señor, Rey de Israel, estará siempre presente entre ustedes. Por eso ninguna desgracia volverá a caer sobre ustedes.


¡Regocíjate grandemente, pueblo mío! ¡Grita de alegría, Jerusalén! ¡Tu rey viene montado sobre un burrito! ¡Es un rey justo y humilde, y viene a salvarte!


Jesús permanecía de pie ante Pilato. ―¿Eres el Rey de los judíos? —le preguntó el gobernador romano. ―Sí —le respondió—. Tú lo has dicho.


Primero lo llevaron al pretorio. Allí, reunida la soldadesca,


Pilato le preguntó: ―¿Eres tú el rey de los judíos? Él respondió: ―Tú mismo lo dices.


Comenzaron a acusarlo, diciendo: ―Encontramos a este hombre alborotando a nuestra nación. Está en contra de que se paguen impuestos al emperador y asegura que él es el Cristo, el rey.


Natanael exclamó: ―Maestro, ¡tú eres el Hijo de Dios! ¡Tú eres el Rey de Israel!


Entonces tomaron ramas de palma y salieron a recibirlo, gritando: ―¡Hosanna! ―¡Bendito el que viene de parte del Señor! ―¡Bendito el Rey de Israel!


«No tengas miedo, oh ciudad de Sion; aquí viene tu rey, montado sobre un burrito».


Jesús le respondió: ―¿Dices eso por tu propia cuenta o es que otros te han hablado de mí?


Pilato le dijo: ―Entonces eres rey. Jesús le respondió: ―Tú eres el que dices que soy rey. Yo para esto nací y vine al mundo: para hablar de la verdad. Todo el que está de parte de la verdad, me escucha.


Pilato preguntó: ―¿Y qué es la verdad? Luego de decir esto, salió otra vez a ver a los judíos. Él dijo: ―Yo no encuentro a este culpable de nada.


Desde ese momento Pilato trató de poner en libertad a Jesús, pero los judíos gritaban: ―Si dejas en libertad a ese hombre, no eres amigo del emperador. Cualquiera que quiera ser rey, es enemigo del emperador.


Mientras se acercaban a pegarle en la cara, le gritaban: ―¡Viva el rey de los judíos!


Pilato volvió a salir y les dijo a los judíos: ―Aquí está. Lo saqué para que sepan que no creo que sea culpable de nada.


Entró una vez más en el palacio y le preguntó a Jesús: ―¿De dónde eres tú? Pero Jesús no le respondió.


Te ordeno en el nombre de Dios, que da vida a todas las cosas, y en el nombre de Cristo Jesús, que admirablemente dio testimonio delante de Poncio Pilato,


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