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Jeremías 52:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

4 El noveno año del reinado de Sedequías, el día diez del décimo mes, Nabucodonosor; rey de Babilonia, marchó con todo su ejército contra Jerusalén, construyó fuertes en torno

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Biblia Reina Valera 1960

4 Aconteció, por tanto, a los nueve años de su reinado, en el mes décimo, a los diez días del mes, que vino Nabucodonosor rey de Babilonia, él y todo su ejército, contra Jerusalén, y acamparon contra ella, y de todas partes edificaron contra ella baluartes.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Así que el 15 de enero, durante el noveno año del reinado de Sedequías, Nabucodonosor, rey de Babilonia, dirigió a todo su ejército contra Jerusalén. Rodearon la ciudad y construyeron rampas de asalto contra las murallas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Sedecías se rebeló contra el rey de Babilonia. El año nueve del reinado de Sedecías, el día diez del décimo mes del año, Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó con todo su ejército a atacar a Jerusalén, instaló su campamento frente a la ciudad y la rodeó de trincheras.

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La Biblia Textual 3a Edicion

4 y en el noveno año de su reinado, en el mes décimo, a los diez días del mes, Nabucodonosor rey de Babilonia, vino con todo su ejército contra Jerusalem, y acampó contra ella y levantaron torres de asedio en derredor.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Por eso, en el año noveno de su reinado, en el mes décimo, el día diez del mes, llegó Nabucodonosor, rey de Babilonia, con todo su ejército contra Jerusalén, acampó frente a ella y construyó un muro de asedio alrededor.

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Jeremías 52:4
22 Tagairtí Cros  

Yo seré su enemigo, yo rodearé a Jerusalén y la sitiaré, y luego construiré fuertes en torno a ella para destruirla.


Quizá el Señor quiera ayudarnos y realice un gran milagro como en el pasado y obligue a Nabucodonosor a retirar sus ejércitos invasores.


Mira cómo se han elevado los montículos de asalto contra las murallas de la ciudad, y cómo los babilonios tomarán la ciudad por el poder de sus ejércitos, por el hambre y la enfermedad. Todo ha ocurrido como tú dijiste, como planeaste que ocurriera.


Este es el mensaje del Señor que llegó a Jeremías cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, y todos sus ejércitos de todos los reinos que gobernaba, llegaron a combatir contra Jerusalén y las ciudades de Judá:


Fue en enero del noveno año del reinado del rey Sedequías de Judá que el rey Nabucodonosor y su ejército volvieron a atacar a Jerusalén y la sitiaron.


Ahora rodean a Jerusalén como si fueran pastores enfurecidos que acosan a un animal salvaje encerrado en un corral. Y esto es como consecuencia de que contra mí se ha rebelado mi pueblo, dice el Señor.


los de la ciudad abrieron un boquete en el muro y por la noche huyeron todos los soldados pasando junto a la puerta que hay entre los dos muros cerca de los jardines del rey (pues la ciudad estaba sitiada por los caldeos), y veloces se escurrieron por los campos hacia el Arabá.


¡Y decidirán dirigirse hacia Jerusalén! Con arietes arremeterán contra las puertas y en medio de gritos de guerra construirán torres para sitiarla y terraplenes para escalar la muralla hasta llegar a su parte más alta y luego penetrar al interior de la ciudad y conquistarla.


Yo trastornaré y arruinaré este reino, para que aun el nuevo orden que surja no tenga éxito, hasta que venga el Hombre que tiene derecho a él. Y se lo daré a él.


Primero destruirá tus suburbios, luego atacará la ciudad en tierra firme construyendo un cerco militar y atacando luego de sorpresa con toda su furia contra ella.


En el decimosegundo año de nuestro exilio, a fines de diciembre, uno de aquellos que escapó de Jerusalén llegó para decirme: «¡La ciudad ha sido conquistada!».


A principios de abril del vigésimo quinto año de nuestro exilio, el decimocuarto año después de que Jerusalén fue capturada, la mano del Señor vino sobre mí,


Haré que todo el castigo anunciado en mi ley caiga sobre ustedes. Huirán a las ciudades y enviaré plagas contra ustedes allí. Serán conquistados por sus enemigos.


«Los ayunos y los otros rituales tradicionales de los meses cuarto, quinto, séptimo y décimo ya no serán expresión de constricción sino de alegría y festejo; serán días de fiesta y de gozo para todo el pueblo. Me interesa más que amen la paz y la verdad.


Llegarán sobre ti días en que tus enemigos harán un muro y te rodearán, y te atacarán por todos lados.


»Cuando vean a Jerusalén rodeada de ejércitos, sepan que su destrucción está cerca.


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