Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Jeremías 30:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

6 ¿Dan a luz los hombres? ¿Por qué están entonces ahí, con rostro ceniciento, con las manos apretadas contra la cintura como mujeres a punto de dar a luz?

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

6 Inquirid ahora, y mirad si el varón da a luz; porque he visto que todo hombre tenía las manos sobre sus lomos, como mujer que está de parto, y se han vuelto pálidos todos los rostros.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Déjenme hacerles una pregunta: ¿Acaso los varones dan a luz? ¿Entonces por qué están parados allí con sus caras pálidas y con las manos apoyadas sobre el vientre como una mujer en parto?

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Pregunten y miren: ¿han visto que un hombre esté esperando un hijo? Pues entonces, ¿por qué veo a los hombres con las manos en las caderas como mujer que da a luz y sus caras se han puesto amarillas?

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Inquirid y averiguad: ¿Da a luz el varón? ¿Por qué pues, veo a todo varón como parturienta: Las manos a las caderas; los rostros lívidos y demudados?

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Preguntad, pues, y ved si dan a luz los varones. Entonces, ¿por qué veo a todo hombre con las manos en las caderas, como parturienta, y todos los rostros se alteran

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 30:6
19 Tagairtí Cros  

aterrorizados por lo que han visto; van llenos de pánico, como mujer acongojada por los dolores de parto,


Tengo retortijones y dolor de estómago, siento agudas punzadas de horror, como de mujer que da a luz. Me desmayo al oír lo que Dios planea, estoy horrorizado, me ciega la angustia.


Por eso dice el Señor que liberó a Abraham: Ya mi pueblo no volverá a palidecer de miedo ni será más avergonzado.


¿Qué sentirás cuando apresen y castiguen a tus dirigentes, los líderes que habías preparado? Seguro te retorcerás de dolor como mujer que da a luz.


Seguro que es muy bonito vivir con elegancia en un hermoso palacio construido con madera de cedro del Líbano, pero pronto llorarás y gemirás angustiado como mujer a punto de dar a luz.


Entonces escuché un gran llanto y gemidos, como de parturienta primeriza. ¡Es el clamor de mi pueblo jadeante que suplica socorro, vencido por el enemigo!


Sus ciudades han sido destruidas, sus fortalezas defensivas han sido tomadas. A sus más fuertes guerreros les tiembla el corazón de miedo como a mujer ante los dolores del parto.


El que ha de venir volará veloz como un águila y extenderá sus alas contra Bosra. ¡Entonces el valor de los más fuertes guerreros se desvanecerá como el de mujer ante los dolores del parto!


Damasco se ha debilitado y todo su pueblo se da a la fuga. El miedo, la angustia y el dolor la atenazan como a mujer con dolores de parto.


Cuando recibió el mensaje, el rey de Babilonia dejó impotente caer los brazos; el terror le produjo dolores como de mujer a punto de dar a luz.


La fama de sus ejércitos hemos oído, y el miedo nos debilita. El miedo y el dolor nos atenazan como a mujer a punto de dar a luz.


Su rostro palideció de miedo, y tal pavor se apoderó de él, que sus rodillas temblaban y sus piernas se aflojaron.


Se le ofrece la oportunidad de un nuevo inicio, como un nuevo nacimiento, pero es como un niño que se resiste a nacer. ¡Qué testarudo! ¡Cuán necio!


El terror se apodera de la gente que los ve llegar; sus rostros palidecen de miedo.


En poco tiempo la ciudad ha quedado como un matadero vacío. Los corazones laten acelerados de terror; tiemblan las rodillas; la gente se estremece de dolor y todos palidecen de espanto.


Cuando la gente esté diciendo: «Hay paz y seguridad», entonces, de repente vendrá sobre ellos la destrucción. Llegará como le llegan a la mujer embarazada los dolores de parto. No habrá forma de que escapen.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí