Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Jeremías 25:37 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

37 Los que ahora viven a sus anchas serán truncados por la ferocidad de la cólera del Señor.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

37 Y los pastos delicados serán destruidos por el ardor de la ira de Jehová.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

37 Debido al gran enojo del Señor, los prados tranquilos se convertirán en tierra baldía.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

37 ya no hay vida en los potreros verdes por el ardor de la cólera de Yavé.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

37 Los pastizales han sido reducidos al silencio, A causa del ardor de la ira de YHVH.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

37 y enmudecen las tranquilas praderas ante la ira furibunda de Yahveh.

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 25:37
10 Tagairtí Cros  

¡El Señor es rey! ¡Regocíjese la tierra entera! Que las más lejanas islas se alegren.


Deshabitados quedarán los palacios y las mansiones, y vacías las ciudades populosas. Montaraces manadas de burros y cabras pastarán en los montes donde estaban las torres de vigía.


¡Pues miren, el Señor vendrá con fuego y con veloces carros de juicio para derramar la furia de su ira y su ardiente reprensión entre llamas de fuego!


Muchos gobernantes extranjeros han asolado a mi pueblo como si fuera un viñedo maltratado, pisoteando las vides y transformando su belleza en estéril desierto.


Mi pueblo sembró trigo y cosechó espinos; trabajaron afanosamente, pero sin provecho. Tendrán cosecha tan raquítica que se avergonzarán de ella, y es que sobre ellos pesa la tremenda cólera del Señor.


¡Vean los ejércitos que marchan desde el norte! ¿Dónde está tu rebaño, Jerusalén, el hermoso rebaño que te di a apacentar?


Escuchen los frenéticos gritos de los pastores y de los otros líderes que claman desesperados porque el Señor ha arruinado sus pastos.


Y ellos devorarán tus cosechas y el pan de tus hijos e hijas, se apropiarán de tus rebaños de ovejas y tu ganado; sí, y también se comerán tus uvas e higos; y saquearán tus ciudades, las que tú considerabas muy seguras por tener fuertes murallas y torreones defensivos.


Porque nuestro Dios es fuego consumidor.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí