Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Jeremías 22:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

20 Llora, porque se han ido tus aliados. Búscalos en el Líbano, llámalos a gritos en Basán, búscalos en los vados del Jordán. Mira, todos han muerto, no quedó ni uno que te ayude.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

20 Sube al Líbano y clama, y en Basán da tu voz, y grita hacia todas partes; porque todos tus enamorados son destruidos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 Llora por tus aliados en el Líbano; grita por ellos en Basán. Búscalos en las regiones al oriente del río. Mira, todos han sido destruidos. No quedó nadie para ayudarte.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Sube a los cerros del Líbano y grita; levanta tu voz desde los cerros de Basán y de lo alto del Abarim, porque todos tus amantes han sido aplastados.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Sube al Líbano y clama, Eleva tu voz en Basán; Clama desde el Abarim,° Porque todos tus amantes han sido destruidos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Sube al Líbano y grita, en el Basán alza tu voz, grita desde Abarín, pues todos tus amantes están aplastados.

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 22:20
22 Tagairtí Cros  

(El faraón egipcio jamás volvió después de ello, porque el rey de Babilonia ocupó todo el territorio que Egipto pretendía tomar, desde el río de Egipto hasta el río Éufrates).


Ya verán que nada ni nadie en toda la gran colección de ídolos que tienen podrá ayudarlos cuando clamen pidiéndoles salvación. ¡Tan débiles son, que el viento puede llevárselos! Un soplo puede arrastrarlos. Pero todo el que confía en mí poseerá la tierra y heredará mi santo monte.


¿Por qué no dejas al estéril correr tras otros dioses? Sabes que el Señor te provee para tus necesidades, pero tú dices: «No malgastes palabras. ¡Estoy enamorada de estos extranjeros y no puedo dejar de amarlos ahora!».


Por aquí y por allá andas mariposeando de un aliado a otro en busca de socorro, pero de nada te valdrá pues tus nuevos amigos de Egipto te abandonarán como antes lo hizo Asiria.


Quedarás desesperada y te cubrirás el rostro con las manos desesperada, porque el Señor ha rechazado a aquéllos en quienes confías. No triunfarás por más que te ayuden.


Y ahora todos tus aliados han desaparecido con un soplo del viento. A todos tus amigos se los llevaron como esclavos. Sin duda por fin comprenderás tu maldad y tendrás vergüenza.


Hay una ley según la cual quien se divorcia de una mujer que luego se casa con otro, no debe volver a tomarla, pues ella queda mancillada. Pero aunque tú me has abandonado y te has juntado con muchos amantes, yo te he instado a que vuelvas a mí, dice el Señor.


¿Y ahora tú, Jerusalén, por qué te pones tu vestido más lindo y las joyas más valiosas y te esmeras tanto con tu maquillaje? ¡No tiene sentido nada de lo que haces! ¡Tus aliados, a los que buscaste para que fueran tus amantes, ahora te desprecian y lo que quieren es verte muerta!


Pedí ayuda a mis amantes pero ellos me traicionaron. Mis sacerdotes y mis sabios consejeros murieron mientras buscaban comida para sobrevivir.


Llora toda la noche; las lágrimas corren por sus mejillas. Entre todos sus amantes no hay quien la consuele. Todos sus amigos la han traicionado y son ahora sus enemigos.


»¡Y ahora el Señor Dios dice que se pondrá en tu contra, oh Aholibá (Jerusalén), esas mismas naciones de las que te alejaste disgustada!


Por ello la entregué en las garras de los asirios cuyos dioses ella amaba tanto.


Tus remos están hechos de robles de Basán. Las paredes de tu cabina son de ciprés de la costa sur de Chipre.


Un día el Señor le dijo a Moisés: ―Sube al monte Abarín y verás al otro lado del río la tierra que he dado al pueblo de Israel.


«Sube al monte Nebo en los montes Abarín, en la tierra de Moab a este lado de Jericó. Sube hasta su cumbre, y observa la tierra que está al otro lado del río en Canaán, la tierra que le doy al pueblo de Israel.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí