Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Isaías 24:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

4-5 La tierra sufre por los pecados de su pueblo. La tierra languidece, los cultivos se marchitan, los cielos niegan la lluvia. El país está corrompido por el crimen; el pueblo ha torcido las leyes de Dios y ha quebrantado sus mandamientos eternos.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

4 Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 La tierra está de duelo y se seca, y el suelo se consume y se marchita; hasta los mejores habitantes de la tierra se consumen.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 La tierra está de duelo y se seca, el mundo está agotado y decae, el cielo y la tierra se debilitan.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

4 De duelo está la tierra, se reseca; Languidece el universo, se marchita; Los encumbrados° de la tierra desfallecen.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Se entristece, languidece la tierra, desfallece, languidece el orbe, desfallecen el cielo y el suelo.

Féach an chaibidil Cóip




Isaías 24:4
12 Tagairtí Cros  

En aquel día el Señor castigará en el cielo a los ángeles caídos, y en la tierra a los orgullosos gobernantes del mundo.


La tierra será totalmente vaciada y saqueada. El Señor ha hablado.


¡Ay de la ciudad de Samaria! Samaria, rodeada de su rico valle, orgullo y deleite de los borrachos de Israel. ¡Ay de su belleza que se marchita, máximo esplendor de una nación cuyos hombres yacen ebrios por las calles!


Hay tribulación en toda la tierra de Israel; el Líbano ha sido destruido; Sarón se ha vuelto un desierto; Basán y el Carmelo han sido saqueados.


Estamos completamente contaminados e inmundos de pecado. Todas nuestras buenas obras son como inmundos harapos. Como hojas de otoño nos decoloramos, nos marchitamos y caemos. Como viento, nos arrastran nuestros pecados.


¿Hasta cuando tendrá esta tierra tuya que soportar la conducta de ellos? ¡Aun la hierba del campo tiene que pagar las consecuencias por las perversidades que ellos cometen! Las bestias y aves silvestres han huido, dejando desierta la tierra. Sin embargo, el pueblo dice: «Dios no nos llevará a juicio. Estamos completamente a salvo».


La tierra llorará, los cielos estarán enlutados por la decisión contra mi pueblo, pero estoy resuelto y no la cambiaré.


Los caminos que conducen a Jerusalén están muy tristes, pues no hay quien venga con alegría a celebrar las fiestas del templo. Las puertas de acceso a la ciudad están desportilladas, sus sacerdotes gimotean, las jóvenes afligidas y Jerusalén sufren amargamente.


Por eso la gente está de luto, todos están tristes y deprimidos. ¡Hasta los animales del campo, las aves del cielo y los peces están padeciendo los efectos de su maldad!


Los campos están secos, la tierra está vacía. Se perdió la cosecha del trigo, ya no hay vino y se acabó el aceite.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí