Hechos 6:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

¹⁵ Entonces los presentes en el salón del concilio vieron que el rostro de Esteban se parecía al de un ángel.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ En ese momento, todos los del Concilio Supremo fijaron la mirada en Esteban, porque su cara comenzó a brillar como la de un ángel.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ En ese momento todos los que estaban sentados en el Sanedrín fijaron los ojos en Esteban, y su rostro les pareció como el de un ángel.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ Pero al clavar en él la vista, todos los que estaban sentados en el Sanedrín vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Y fija la vista en él, todos los que estaban sentados en el sanedrín vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Hechos 6:15 Tagairtí Cros

Eclesiastés 8:1

¡Qué admirable es ser sabio, para poder comprender, analizar e interpretar las cosas! La sabiduría ilumina el rostro del ser humano, suavizando sus durezas.

Mateo 13:43

Entonces los justos brillarán como el sol en el reino del Padre. ¡El que tenga oídos, oiga!

Mateo 17:2

Allí Jesús se transfiguró delante de los discípulos. Su rostro se volvió brillante como el sol, y su ropa blanca como la luz.

Mateo 5:22

Pues yo añado que el que se enoja contra su hermano está cometiendo el mismo delito. El que le dice “idiota” a su hermano, merece que lo lleven al juzgado. Y el que maldiga a una persona, merece ir a parar a las llamas del infierno.

Marcos 8:25

Jesús le colocó de nuevo las manos sobre los ojos, y el hombre miró fijamente y pudo ver todo con claridad.

Hechos 7:1

―¿Son ciertas estas acusaciones? —le preguntó el jefe de los sacerdotes.

2 Corintios 3:18

Así que todos nosotros, con el rostro descubierto, reflejamos la gloria del Señor como si fuéramos espejos. Y el Espíritu del Señor nos va transformando de gloria en gloria, y cada vez nos parecemos más a él.