Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Hechos 20:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

9 Como el discurso de Pablo se prolongaba, un joven llamado Eutico, que estaba sentado en la ventana, se quedó dormido y cayó desde tres pisos arriba a la calle. Lo levantaron muerto.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

9 y un joven llamado Eutico, que estaba sentado en la ventana, rendido de un sueño profundo, por cuanto Pablo disertaba largamente, vencido del sueño cayó del tercer piso abajo, y fue levantado muerto.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Como Pablo hablaba y hablaba, a un joven llamado Eutico, que estaba sentado en el borde de la ventana, le dio mucho sueño. Finalmente se quedó profundamente dormido y se cayó desde el tercer piso y murió.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Un joven, llamado Eutico, estaba sentado en el borde de la ventana, y como Pablo no terminaba de hablar, el sueño acabó por vencerle. Se durmió y se cayó desde el tercer piso al suelo. Lo recogieron muerto.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Y a cierto joven que estaba sentado en la ventana, llamado Eutico, lo iba dominando un sueño profundo mientras Pablo disertaba largamente, hasta que, rendido por el sueño, cayó del tercer piso abajo, y fue levantado muerto.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Un muchacho de nombre Eutiques estaba sentado sobre la ventana y se iba adormilando a medida que Pablo prolongaba su discurso, hasta que, vencido por el sueño, cayó desde el tercer piso abajo y lo recogieron ya muerto.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 20:9
9 Tagairtí Cros  

―Dámelo —respondió Elías. Elías tomó el cuerpo del niño y lo llevó al aposento alto, a la pieza de huéspedes donde vivía, y puso al niño en la cama.


Por eso deben mantenerse alertas, no sea que venga de repente y los encuentre durmiendo.


El espíritu gritó, sacudió violentamente al muchacho, y salió de él. El muchacho quedó inmóvil como si estuviera muerto. Por eso, muchos decían: ―¡Está muerto!


Sin embargo, llegaron de Antioquía e Iconio varios judíos que hicieron que ese gentío cambiara de parecer y apedreara a Pablo. Como creían que estaba muerto, lo arrastraron fuera de la ciudad.


Pablo corrió escaleras abajo, se acostó sobre él, y lo abrazó. ―¡No se alarmen! —dijo—. ¡Está vivo!


El domingo nos reunimos a partir el pan y, como al siguiente día partía Pablo, estuvo hablando hasta la medianoche.


La habitación en que se encontraban, un cuarto en el piso de arriba, estaba iluminada por varias lámparas.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí