Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Hechos 16:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

6 Luego atravesaron Frigia y Galacia, porque el Espíritu Santo les prohibió predicar en la provincia de Asia.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Luego, Pablo y Silas viajaron por la región de Frigia y Galacia, porque el Espíritu Santo les había impedido que predicaran la palabra en la provincia de Asia en ese tiempo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Atravesaron Frigia y la región de Galacia, pues el Espíritu Santo no les dejó que fueran a predicar la Palabra en Asia.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Y viajaron a través de la región de Frigia y Galacia, pues el Espíritu Santo les impidió hablar la palabra en Asia.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Habiéndoles impedido el Espíritu Santo predicar la palabra en Asia, cruzaron Frigia y la región de Galacia,

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 16:6
31 Tagairtí Cros  

Y si abandonan las sendas de Dios y se extravían, escucharán tras ustedes una voz que dirá: ―No, este es el camino, caminen por aquí.


según nos las contaron quienes fueron testigos presenciales de todo desde el principio. Ellos eran también servidores de la Palabra.


Pedro, que estaba tratando de descifrar el significado de la visión, escuchó que el Espíritu Santo le decía: «Tres hombres han venido a verte.


El Espíritu me dijo que fuera con ellos sin dudar. Estos seis hermanos que están aquí conmigo me acompañaron y llegamos a la casa de cierto hombre.


Luego llegaron a Misia y quisieron ir hasta la provincia de Bitinia; pero el Espíritu les ordenó que no lo hicieran.


De Antioquía, donde pasó algún tiempo, se dirigió de nuevo a las regiones de Galacia y Frigia, alentando a todos los discípulos.


Así continuó durante los dos años siguientes. No quedó en la provincia de Asia un solo judío o griego, que no escuchara la palabra del Señor.


Pablo había decidido no visitar Éfeso esa vez, porque deseaba llegar a tiempo a Jerusalén para la celebración de Pentecostés.


Por lo tanto, ¡cuídense y cuiden el rebaño! ¡Deben pastorear la iglesia que él compró con su sangre! ¡El Espíritu Santo les ha dado a ustedes la responsabilidad de cuidarla!


Varios hombres lo acompañaron hasta Asia. Entre estos se encontraban Sópater hijo de Pirro; Aristarco y Segundo, de Tesalónica; Gayo de Derbe; Timoteo; y Tíquico y Trófimo de Asia.


Casi al final de los siete días, varios judíos de Asia lo vieron en el templo y provocaron un escándalo contra él.


Pero un día, varios miembros de la sinagoga llamada los Libertos se pusieron a discutir con él. Discutían también con Esteban judíos de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia.


«Da alcance a esa carroza —le dijo el Espíritu Santo a Felipe—, y acércate a ella».


Salúdenme también a las personas que se congregan a adorar al Señor en la casa de Priscila y Aquila. También a Epeneto, mi gran amigo, él fue el primero en convertirse al cristianismo en Asia.


Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, y él da tales dones y determina cuál ha de recibir cada uno.


Estas son las instrucciones en cuanto al dinero que están recogiendo para ayudar a los cristianos, instrucciones que di también a las iglesias de Galacia.


Las iglesias de Asia les envían saludos. Aquila y Priscila les saludan con mucho afecto, y lo mismo hacen los hermanos que se reúnen en casa de ellos.


Creo que deben conocer, hermanos, las tribulaciones que pasamos en Asia. Nos vimos tan aplastados bajo tanta presión, que temimos no salir de allí con vida.


y los demás hermanos que están conmigo, a las iglesias de Galacia.


¡Oh gálatas, qué estúpidos son ustedes! ¿Quién los embrujó? ¡A ustedes les hemos presentado claramente el mensaje de la muerte de Jesucristo!


Como sabrás, los de la provincia de Asia me han abandonado, aun Figelo y Hermógenes.


porque Demas me abandonó por amor a las cosas de este mundo y se fue a Tesalónica. Crescente se fue a Galacia, y Tito a Dalmacia.


Por la fe, Abraham, cuando fue llamado para ir al lugar que iba a recibir como herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba.


Pedro, apóstol de Jesucristo, a los que han sido elegidos y que viven como extranjeros esparcidos por el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia:


me dijo: «Escribe en un libro todo lo que veas, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea».


Yo Juan, les escribo a las siete iglesias que están en la provincia de Asia: Gracia y paz a ustedes de Aquel que es, que era y que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de su trono,


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí