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Hechos 12:24 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

24 La palabra de Dios se propagaba y se extendía.

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Biblia Reina Valera 1960

24 Pero la palabra del Señor crecía y se multiplicaba.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

24 Mientras tanto, la palabra de Dios seguía extendiéndose, y hubo muchos nuevos creyentes.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

24 Mientras tanto la Palabra de Dios crecía y se difundía.

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La Biblia Textual 3a Edicion

24 Pero la palabra de Dios° crecía y era multiplicada.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 La palabra del Señor crecía y se multiplicaba.

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Hechos 12:24
13 Tagairtí Cros  

Cuando los malvados triunfan, la gente se esconde; cuando los malvados caen, los justos prosperan.


Así como la lluvia y la nieve descienden del cielo y permanecen en la tierra para regarla, haciendo que la tierra dé grano y produzca semilla para el sembrador y pan para el hambriento,


Entonces Daniel entró a ver a Arioc, a quien se le había ordenado ejecutar a los sabios de Babilonia, y le dijo: ―No los mates. Llévame al rey y yo le diré el significado del sueño.


»Durante el gobierno de estos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino que jamás será destruido, al que nadie jamás podrá conquistar. Este reino de Dios destruirá a todos estos reinos, pero él mismo permanecerá estable para siempre.


Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia, y los poderes del infierno no prevalecerán contra ella.


El poder del Señor estaba con ellos y muchas personas se hicieron creyentes y se convirtieron al Señor.


Así crecía y prevalecía poderosamente la palabra del Señor.


Mas si es de Dios, ustedes no podrán detenerlos. ¡No sea que descubran que han estado peleando contra Dios!


El mensaje de Dios se seguía extendiendo y el número de los discípulos aumentaba enormemente en Jerusalén, donde muchos de los sacerdotes judíos obedecían a la fe.


Esas buenas nuevas que escucharon ustedes están dando fruto y creciendo en todo el mundo, como también sucedió entre ustedes mismos desde el día en que escucharon y entendieron la gracia de Dios.


Finalmente, hermanos, les suplico que oren por nosotros. Pidan que el mensaje del Señor se propague rápidamente y que sea recibido y apreciado, como sucedió entre ustedes.


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