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Hebreos 8:2 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

2 y oficia en el santuario. Es decir, en el verdadero lugar de adoración que fue hecho por el Señor y no por ningún ser humano.

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Biblia Reina Valera 1960

2 ministro del santuario, y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Allí sirve como ministro en el tabernáculo del cielo, el verdadero lugar de adoración construido por el Señor y no por manos humanas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 él está a cargo del santuario y de la tienda verdadera, levantada no por hombres, sino por el Señor.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 ministro de las cosas santas y del verdadero tabernáculo que erigió el Señor y no el hombre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Él es ministro del santuario y de la Tienda verdadera que construyó el Señor y no un hombre.

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Hebreos 8:2
15 Tagairtí Cros  

Mi santuario será una tienda, un tabernáculo. Yo te daré el diseño de la construcción y los detalles de todos los utensilios.


»Consagra a tu hermano Aarón y a sus hijos Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar, para que me sirvan como sacerdotes y ministros.


Aarón usará el efod siempre que entre a servir delante del Señor. Las campanillas sonarán cada vez que él entre y salga de la presencia del Señor en el Lugar Santo, para que no muera.


Moisés siempre levantaba, a cierta distancia del campamento, el santuario o Tienda de reunión con Dios. Todo el que quería consultar al Señor, iba allí.


―Recuerden que cuando todavía estaba yo con ustedes, les decía que tenía que cumplirse todo lo que está escrito acerca de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos.


Recuerden que Jesucristo vino a demostrar que Dios es fiel a las promesas dadas a los patriarcas, y por eso les sirvió a los judíos.


Sabemos que cuando esta tienda de campaña en que vivimos se desmantele, recibiremos de Dios un edificio, una casa eterna en el cielo, no construida por manos humanas.


Por estar unidos a Cristo, él los libertó de su naturaleza pecaminosa, no por medio de la circuncisión que se hace en el cuerpo, sino por medio de la circuncisión que hace Cristo.


Todo sacerdote celebra el culto día tras día ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados.


Además, en él tenemos un gran sacerdote que está al frente de la familia de Dios.


porque Abraham esperaba la ciudad que tiene cimientos firmes, la que Dios ha planeado y construido.


Ahora bien, el primer pacto tenía reglas para el culto y un santuario aquí en la tierra.


Oí entonces que una potente voz gritaba desde el trono: «La casa de Dios está ahora entre los seres humanos, y él vivirá con ellos. Ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos, y será su Dios.


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