Génesis 37:24 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

²⁴ y lo arrojaron a una cisterna vacía.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ y le tomaron y le echaron en la cisterna; pero la cisterna estaba vacía, no había en ella agua.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ Después lo agarraron y lo tiraron en la cisterna. Resulta que la cisterna estaba vacía; no tenía nada de agua adentro.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ lo tomaron y lo arrojaron a una cisterna que estaba seca, sin agua.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ y lo tomaron, y lo arrojaron en la cisterna. Pero la cisterna estaba vacía, no había en ella agua.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ lo agarraron y lo arrojaron a la cisterna. Pero la cisterna estaba vacía. No tenía agua.

Génesis 37:24 Tagairtí Cros

Génesis 37:23

Cuando José llegó donde ellos estaban, le quitaron su túnica de mangas largas,

Génesis 37:25

Luego se sentaron a comer. De repente vieron a la distancia una caravana de Ismaelitas que venían de Galaad. Sus camellos iban cargados de perfumes, especias y bálsamos que llevaban a vender a Egipto.

Génesis 42:21

Luego se pusieron a conversar entre ellos y decían: ―Esto nos ha ocurrido como consecuencia de lo que le hicimos a José en nuestra juventud. Vimos el terror y la angustia suya y oímos sus ruegos, pero no le hicimos caso.

Salmos 35:7

Pues aunque ningún mal les hice, me tendieron una trampa y aunque ningún mal les hice, cavaron una fosa para mí.

Salmos 40:2

Me sacó del abismo de la desesperación, del pantano y del lodo; puso mis pies sobre senda dura y firme, y me fortaleció mientras yo proseguía mi camino.

Salmos 88:6

Me has arrojado al hoyo más profundo, al más oscuro abismo.

Salmos 88:8

Has hecho que mis amigos me detesten, y ellos se han alejado. Estoy en una trampa y no puedo salir.

Jeremías 38:6

Sacaron pues, a Jeremías de su celda y atado con cuerdas lo bajaron a una cisterna seca en el patio de la cárcel. (La cisterna pertenecía a Malquías, miembro de la familia real). No había agua en ella, pero sí una gruesa capa de lodo en el fondo, en la cual se hundió Jeremías.

Lamentaciones 4:20

De nuestro rey, el escogido del Señor, el que era para nosotros como el aire que respiramos, de quien decíamos: ¡Bajo su protección podremos resistir a cualquier nación sobre la tierra!, él también ha sido apresado.

Zacarías 9:11

Debido al pacto que hice contigo, el cual sellé con sangre, yo libraré a tus cautivos de ese pozo seco que les servía de prisión.