Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Éxodo 28:30 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

30 Dentro del pectoral pondrás el urim y el tumim, para que Aarón los lleve junto a su corazón cuando entre en la presencia del Señor. De esta manera llevará siempre, junto a su corazón, el urim y el tumim que le servirán para impartir justicia.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

30 Y pondrás en el pectoral del juicio Urim y Tumim, para que estén sobre el corazón de Aarón cuando entre delante de Jehová; y llevará siempre Aarón el juicio de los hijos de Israel sobre su corazón delante de Jehová.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Dentro del pectoral sagrado meterás el Urim y el Tumim, para que Aarón los lleve sobre su corazón cuando se presente ante el Señor. De este modo, cada vez que Aarón entre a la presencia del Señor, llevará siempre sobre su corazón los objetos que se usan para determinar la voluntad del Señor para su pueblo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 En el mismo Pectoral de las Sentencias pondrás el Urim y el Tumin para que estén sobre el corazón de Aarón cuando se presente delante de Yavé, y sobre su corazón llevará el Pectoral de las Sentencias de los hijos de Israel en la presencia de Yavé.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Y en el pectoral del juicio pondrás el Urim y Tumim,° para que estén sobre el corazón de Aarón cuando entre delante de YHVH. Aarón llevará continuamente el juicio de los hijos de Israel sobre su corazón delante de YHVH.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Pondrás el urim y tummin en el pectoral del juicio, para que estén sobre el corazón de Aarón cuando se presente ante Yahveh. Aarón llevará así constantemente sobre su corazón, delante de Yahveh, el oráculo de los israelitas'.

Féach an chaibidil Cóip




Éxodo 28:30
22 Tagairtí Cros  

De esta manera, Aarón llevará los nombres de las tribus de Israel en el pectoral, sobre su corazón, cuando entre al Lugar Santo. Así el Señor los recordará continuamente.


Luego le puso el pectoral, y depositó el urim y tumim dentro del pectoral.


Él construirá el templo del Señor, luego se sentará sobre su trono real para gobernar. También un sacerdote se sentará sobre otro trono, a su lado, y habrá completa paz y armonía entre ellos”.


Él consultará a Eleazar el sacerdote para recibir mis órdenes. Yo, el Señor, hablaré con Eleazar por medio del urim, y Eleazar le entregará las instrucciones a Josué y al pueblo. De esta manera continuará guiando a Israel.


Para mí es un placer gastarme por entero y dar todo lo que tengo por el bien de ustedes; no importa que mientras más los ame, menos me amen ustedes.


No digo esto para echarles en cara nada. Como ya les dije, tienen un lugar muy especial en mi corazón y vivo y moriré con ustedes.


Y entonces dijo Moisés de Leví: «Da al piadoso Leví tu urim y tu tumim. Probaste a Leví en Masá y en Meribá,


Por eso era necesario que en todo fuera semejante a sus hermanos, pues sólo así podía ser un sumo sacerdote fiel y misericordioso al servicio de Dios, con el propósito de pagar por los pecados del pueblo.


Nuestro sumo sacerdote entiende nuestras debilidades, porque él mismo experimentó nuestras tentaciones, si bien es cierto que nunca cometió pecado.


Él entró una sola vez y para siempre al Lugar Santísimo. No entró con sangre de chivos y becerros, sino con su propia sangre, logrando así un rescate eterno.


Por eso, Cristo no entró en un santuario hecho por seres humanos, que era una simple copia del verdadero santuario. Entró más bien, en el cielo mismo, para presentarse ante Dios a favor nuestro.


Después de la muerte de Josué, la gente de Israel se presentó delante del Señor para pedirle instrucciones. ―¿Cuál de las tribus será la primera en salir a pelear contra los cananeos? —preguntaron.


Antes de la batalla, los israelitas fueron a Betel a pedir consejo a Dios. ―¿Qué tribu nos guiará contra el pueblo de Benjamín? —le preguntaron. Y el Señor respondió: ―Judá irá delante.


y consultó al Señor sobre lo que debía hacer. Pero el Señor no le contestó ni por sueños, ni por urim, ni por profetas.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí