Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Éxodo 15:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

8 Al soplo de tu aliento las aguas se abrieron. Como diques poderosos se contuvieron las aguas del mar, y se separaron.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

8 Al soplo de tu aliento se amontonaron las aguas; Se juntaron las corrientes como en un montón; Los abismos se cuajaron en medio del mar.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Al soplido de tu aliento, ¡las aguas se apilaron! El impetuoso oleaje se quedó firme como un muro; en el corazón del mar las aguas se endurecieron.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Al soplo de tus narices retroceden las aguas, las olas se paran como murallas; los torbellinos cuajan en medio del mar.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Con el viento de tus narices, Se amontonaron las aguas, Fluyeron erguidas como dique, Los abismos se cuajaron, En el corazón del mar.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Al soplo de tu ira se aglomeran las aguas, se alzan las olas como un dique, se cuajan los abismos en el corazón del mar.

Féach an chaibidil Cóip




Éxodo 15:8
13 Tagairtí Cros  

Por el soplo de su aliento se partió el mar en dos, y se pudo ver el fondo del mar.


Mueren bajo la mano de Dios.


Él puso límites a los mares y encerró los océanos en su gran estanque.


Porque él abrió el mar ante ellos, y los guio a través del mismo. ¡Como muros a ambos lados de ellos se detuvieron las aguas!


En cambio, el pueblo de Israel cruzó el mar por tierra seca, pues las aguas habían formado muros a ambos lados de ellos.


sino que defenderá a los pobres y explotados. Regirá contra los malvados que los oprimen.


Porque al rey va a llegarle un mensaje de Asiria informándole que se le necesita allá inmediatamente, y él volverá a su tierra en donde yo haré que lo maten”».


Los montes te vieron y temblaron. Se desata un aguacero torrencial y una tormenta que agita el mar y eleva sus olas llenas de espuma.


»Con tus caballos corriste por el mar, y sus aguas se desbordaron con violencia.


Entonces aparecerá aquel inicuo; pero el Señor lo consumirá con el soplo de su boca y lo destruirá con el resplandor de su venida.


Cuando los sacerdotes que transportan el cofre toquen el agua con sus pies, el río cesará de correr, como si fuera retenido por un dique».


repentinamente, lejos de allí, en la ciudad de Adán, cerca de Saretán, el agua comenzó a amontonarse como si hubiera un dique. Después de este punto, el agua siguió corriendo hasta el Mar Salado, de modo que el lecho del río quedó seco. Entonces todo el pueblo cruzó el río por la parte que estaba cerca de la ciudad de Jericó,


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí