Efesios 6:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008
9 Y ustedes, amos, actúen de la misma manera con sus esclavos y dejen a un lado las amenazas. Recuerden que ustedes, al igual que ellos, tienen al mismo Señor en el cielo, y que él no tiene favoritos.
9 Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no hay acepción de personas.
9 Y ustedes, amos, traten a sus esclavos de la misma manera. No los amenacen; recuerden que ambos tienen el mismo Amo en el cielo, y él no tiene favoritos.
9 Y ustedes, patrones, actúen con sus siervos de la misma manera y dejen a un lado las amenazas; tengan presente que ellos y ustedes tienen en el cielo un mismo Señor, y que ése no hace distinción de personas.
9 Y los amos: Haced lo mismo con ellos, no recurriendo a la amenaza, sabiendo que el Señor, tanto de ellos como vuestro, está en los cielos,° y que no hay acepción de personas en su presencia.°
9 Y vosotros, amos, tratadlos de esta misma manera, dejando a un lado las amenazas y recordando que está en el cielo el que es Señor de ellos y también vuestro, y que él no discrimina a las personas.
«Somos sus hermanos, y nuestros hijos son iguales a los de ustedes. Sin embargo, hemos tenido que vender a nuestros hijos como esclavos a fin de obtener el dinero que necesitamos para vivir. Ya hemos vendido algunas de nuestras hijas, y no podemos pagar por su libertad, porque nuestros campos también han sido hipotecados a estos hombres».
Si en cualquier parte del país ves que un rico oprime al pobre haciendo abortar la justicia, no te sorprendas. Pues cada subalterno recibe órdenes de más arriba, y los más altos oficiales tienen la mirada puesta en sus jefes. Así es que la cuestión se hace una maraña de papeleo y burocracia. Y por sobre todos está el rey.
Porque enojado estuve con mi pueblo Israel y comencé a castigarlos un poco permitiendo que cayeran en tus manos, oh Babilonia. Pero fuiste despiadada con ellos. Hasta a los ancianos obligaste a llevar pesadas cargas.
Les daré una oportunidad. Cuando oigan la música, si se inclinan y rinden homenaje a la estatua, no tomaré en cuenta su falta; pero si se niegan a hacerlo, serán arrojados inmediatamente en un horno de fuego ardiente. Y entonces, ¿qué dios podrá librarlos de mi castigo?
»No robarán ni oprimirán a nadie. Pagarán con prontitud el salario a sus obreros. Si les deben algo a ellos, no esperen a la mañana siguiente para pagarles.
«Dentro de poco tiempo vendré y los juzgaré. Testificaré prontamente contra los hechiceros, contra los adúlteros, contra los mentirosos, contra los que roban a sus jornaleros, contra los que oprimen a las viudas y a los huérfanos, y contra los que son injustos con los extranjeros, sin tener temor de mí. Lo digo yo, el Señor Todopoderoso.
a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los que han sido santificados en Cristo Jesús y llamados a ser un pueblo santo, junto con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro.
Ustedes no pagaron el salario a los obreros que les trabajaron sus campos, y ese hecho grita contra ustedes. El grito de protesta de esos trabajadores lo ha escuchado el Señor Todopoderoso.