Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Eclesiastés 7:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

20 Y no hay en toda la tierra un ser humano que sea siempre bueno y no peque jamás.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

20 Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 No hay una sola persona en la tierra que siempre sea buena y nunca peque.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 No hay en la tierra ningún hombre lo bastante justo como para hacer el bien sin nunca pecar.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Por cierto, no existe en la tierra hombre tan justo que haga el bien y nunca peque.

Féach an chaibidil Cóip




Eclesiastés 7:20
16 Tagairtí Cros  

»Si pecan contra ti, ¿porque quién no peca?, y tú te enojas con ellos, y dejas que sus enemigos los lleven cautivos a tierras extrañas, cercanas o lejanas,


»Y si ellos pecan contra ti (porque, ¿quién es aquel que nunca ha pecado?), y te enojas con ellos, y dejas que sus enemigos los derroten y se los lleven de aquí cautivos a alguna nación extranjera, cercana o lejana,


»Pues bien, esta es mi respuesta: Precisamente has pecado al hablar así de Dios. Porque Dios es más grande que el hombre.


Si tú tomaras en cuenta nuestros pecados ¿quién, Señor, podría seguir vivo?


Las personas necias afirman que no hay Dios. Están corrompidas, sus obras son detestables; ¡no hay un solo individuo que haga lo bueno!


Pero no; todos se han descarriado; todos están corrompidos por el pecado. No hay ninguno bueno, ¡ni siquiera uno!


¡No me sometas a juicio! Porque, comparado contigo, nadie es perfecto.


¿Quién puede decir: «Tengo puro el corazón, estoy limpio de pecado»?


Nosotros fuimos quienes nos extraviamos como ovejas, nosotros, quienes seguimos nuestro propio camino. ¡Pero Dios echó sobre él la culpa y los pecados de cada uno de nosotros!


Estamos completamente contaminados e inmundos de pecado. Todas nuestras buenas obras son como inmundos harapos. Como hojas de otoño nos decoloramos, nos marchitamos y caemos. Como viento, nos arrastran nuestros pecados.


pero estas se están oscureciendo, no es lepra. Se trata sólo de una infección común de la piel. Por eso, dicha persona es pura.


Es así porque todos hemos pecado y no tenemos derecho a gozar de la gloria de Dios.


Todos fallamos mucho; y si alguien no falla en lo que dice, es una persona perfecta que puede dominar todo su cuerpo.


se retiró de la mesa encendido de ira, y se negó a comer en todo aquel día porque estaba muy herido por la vergonzosa conducta de su padre hacia David.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí