Colosenses 4:3 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

³ Oren también para que Dios nos conceda muchas oportunidades de proclamar el mensaje, pues por ello estoy preso.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

³ orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso,

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Oren también por nosotros, para que Dios nos dé muchas oportunidades para hablar de su misterioso plan acerca de Cristo. Por eso estoy aquí en cadenas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ oren también por nosotros, para que Dios nos dé palabras y pueda yo anunciar el misterio de Cristo. Por ese misterio estoy atado con cadenas;'

La Biblia Textual 3a Edicion

³ orando al mismo tiempo también por nosotros, para que Dios° nos abra puerta para la Palabra, a fin de hablar el misterio del Mesías, por el cual también estoy encadenado;

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Rogad también por nosotros, para que Dios nos abra una puerta a la palabra y así poder anunciar el misterio de Cristo por cuya causa estoy en cadenas,

Colosenses 4:3 Tagairtí Cros

Mateo 13:11

Él les explicó que ellos, los discípulos, era a los únicos a los que se les permitía entender las cosas del reino de los cielos, pero no a los demás. Y añadió:

Hechos 14:27

Sin perder tiempo, reunieron a la iglesia y les informaron de todo lo que Dios había hecho por medio de ellos y les contaron cómo Dios había abierto la puerta de la fe también a los gentiles.

Romanos 16:25

El Dios eterno mantuvo en secreto su plan por muchos siglos, pero ahora lo ha dado a conocer por medio de las Escrituras proféticas. Esto, de acuerdo con su propio mandato, para que todas las naciones obedezcan a la fe. ¡Al que puede fortalecerlos a ustedes conforme a mi evangelio y a la predicación acerca de Jesucristo,

1 Corintios 16:9

Aquí se me han abierto bastante las puertas para predicar, a pesar de que muchos también están en contra de mí.

1 Corintios 4:1

Así que deben tenernos por siervos de Cristo encargados de impartir los secretos del Señor.

2 Corintios 2:12

Bien, cuando llegué a la ciudad de Troas, el Señor me proporcionó formidables oportunidades para predicar el evangelio de Cristo.

Efesios 3:1

Por esta razón yo, Pablo, que estoy en la cárcel por la causa de Cristo Jesús, es decir, por buscar el bien de ustedes los que no son judíos, me arrodillo en oración.

Efesios 3:3

Ya antes les mencioné brevemente que Dios mismo me reveló ese misterio.

Efesios 3:4

Cuando lo lean se darán cuenta de que conozco bien el misterio de Cristo.

Efesios 3:9

Debo hacerles entender a todos que el plan de Dios ya se está cumpliendo. Ese es el plan que desde la eternidad Dios, el Creador de todas las cosas, guardaba oculto.

Efesios 4:1

Yo, pues, que estoy prisionero por servir al Señor, les ruego con todo cariño que se comporten como es digno de los que han sido llamados por Dios.

Filipenses 1:19

porque sé que, gracias a las oraciones de ustedes y a la ayuda del Espíritu de Jesucristo, saldré libre.

Filipenses 1:7

Está bien que yo piense así de todos ustedes, porque los llevo en el corazón. Ya sea que yo esté preso o defendiendo y confirmando el evangelio, todos ustedes participan conmigo del amor que Dios me ha dado.

Colosenses 1:26

A través de los siglos y a lo largo de muchas generaciones, ese plan se había mantenido en secreto, pero por fin el Señor ha querido revelarlo a los suyos.

Colosenses 4:18

Y aquí va un saludo de mi puño y letra: Recuerden que estoy preso. Que Dios los llene de su amor.

1 Tesalonicenses 5:25

Hermanos, oren también por nosotros.

2 Timoteo 1:16

Que el Señor sea misericordioso con Onesíforo y toda su familia, porque muchas veces me confortó y nunca se avergonzó de que yo estuviera preso.

2 Timoteo 2:9

por predicarlo sufro penalidades y me tienen en la cárcel como a un criminal. Pero la Palabra de Dios no está presa.

2 Timoteo 4:2

Con urgencia predica la palabra de Dios; hazlo sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar.

Filemón 1:22

Ten una habitación lista para mí, pues espero que Dios contestará las oraciones de ustedes y permitirá que pronto vaya a verlos.