Cantares 2:16 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

¹⁶ Mi amado es mío y yo soy suya. Él está apacentando entre los lirios.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ Mi amado es mío, y yo suya; Él apacienta entre lirios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ Mi amado es mío, y yo soy suya. Él apacienta entre los lirios.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ Mi amado es para mí, y yo para mi amado; lleva a su rebaño a pastar entre los lirios.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ Ella ¡Mi amado es mío y yo suya! Él pastorea entre los lirios

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ Mi amado es mío y yo soy suya; del pastor de azucenas.

Cantares 2:16 Tagairtí Cros

Salmos 48:14

Este Dios es nuestro Dios por los siglos de los siglos. Él será, nuestro guía hasta que muramos.

Salmos 63:1

¡Oh Dios, mi Dios! ¡Cómo te busco! ¡Qué sed tengo de ti en esta tierra reseca y triste en donde no hay agua! ¡Cómo anhelo encontrarte!

Cantares 1:7

Dime, amado mío, ¿dónde llevas hoy tu rebaño? ¿Dónde harás descansar tus ovejas al mediodía? ¿Por qué he de andar vagando entre los rebaños de tus compañeros?

Cantares 2:1

Yo soy la rosa de Sarón, el lirio de los valles.

Cantares 4:5

Tus pechos son dos gacelas, dos gacelas pastando entre lirios.

Cantares 6:2

Mi amado ha bajado a su huerto, a sus lechos de especias, a apacentar su rebaño y a recoger lirios.

Cantares 6:3

Yo soy de mi amado y mi amado es mío. Él apacienta su rebaño entre los lirios.

Cantares 7:10

Soy de mi amado; ¡su pasión lo atrae hacia mí!

Cantares 7:11

Ven, amado mío, salgamos a los campos y pasemos la noche entre los azahares.

Cantares 7:13

Allí las mandrágoras esparcen su aroma, y a nuestra puerta hallamos las más exóticas frutas, frescas y secas, pues las he guardado para ti, amado mío.

Jeremías 31:33

Este es el nuevo convenio que voy a celebrar con ellos: Grabaré mis instrucciones en el corazón de ellos, para que tengan la voluntad de honrarme; entonces serán verdaderamente pueblo mío y yo seré su Dios.

Zacarías 13:9

A este tercio restante lo someteré a una dura prueba, será como hacerlo pasar por el fuego para purificarlo, así como se hace con el oro y la plata para refinarlos. Entonces se dirigirán a mí con oraciones fervientes y yo les pondré atención. Diré: “¡Este es mi pueblo!”, y ellos dirán: “El Señor es nuestro Dios”.

Gálatas 2:20

Estoy crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí. Y esta vida que ahora tengo la vivo por mi fe en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó por mí.