Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





2 Reyes 9:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

6 Jehú se apartó de los otros y entró en la casa, y el joven derramó el aceite sobre su cabeza y le dijo: «El Señor, Dios de Israel, dice: “Yo te unjo como rey de mi pueblo Israel.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

6 Y él se levantó, y entró en casa; y el otro derramó el aceite sobre su cabeza, y le dijo: Así dijo Jehová Dios de Israel: Yo te he ungido por rey sobre Israel, pueblo de Jehová.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Entonces Jehú dejó a los otros y entró en la casa. Acto seguido, el joven profeta derramó el aceite sobre la cabeza de Jehú y dijo: «Esto es lo que el Señor, Dios de Israel, dice: “Yo te unjo rey del pueblo del Señor, Israel.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Jehú se paró y entró en la casa, entonces el hermano profeta derramó aceite sobre su cabeza diciéndole: 'Esto dice Yavé, Dios de Israel: Te he consagrado como rey del pueblo de Yavé, de Israel.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Y él se levantó y entró en la casa, y Eliseo derramó el aceite sobre su cabeza y le dijo: Así dice YHVH Dios de Israel: ¡Te he ungido como rey sobre Israel, pueblo de YHVH!°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Jehú se levantó y entró en la casa. El joven derramó el aceite sobre su cabeza, mientras le decía: 'Así habla Yahveh, Dios de Israel: yo te unjo por rey del pueblo de Yahveh, de Israel.

Féach an chaibidil Cóip




2 Reyes 9:6
20 Tagairtí Cros  

y el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo ungirán allí como rey de Israel. Luego hagan sonar las trompetas y aclamen: “¡Viva el rey Salomón!”.


¡Bendito sea el Señor tu Dios que te escogió y te puso en el trono de Israel! ¡Cuánto amor le tiene el Señor a Israel, que le ha dado un rey como tú! Y tú le das a tu pueblo un gobierno justo y bueno».


Dale a tu esposo este mensaje de parte del Señor, Dios de Israel: “Tú eras un miembro común del pueblo y te elegí para hacerte rey de Israel.


«Yo te levanté desde el polvo para hacerte rey de mi pueblo Israel, pero tú has andado en los malos caminos de Jeroboán. Has hecho pecar a mi pueblo, y estoy airado.


Luego unge a Jehú hijo de Nimsi, para que sea rey de Israel, y unge a Eliseo hijo de Safat, de Abel Mejolá, para que te reemplace como profeta mío.


Y aquí estoy entre tu pueblo escogido, un pueblo tan numeroso que es imposible contarlo.


y derrama aceite sobre su cabeza. Dile que el Señor lo ha ungido como rey de Israel. Tan pronto hagas esto, sal corriendo y no te detengas».


encontró a Jehú sentado junto con otros jefes del ejército. ―Tengo un mensaje para usted, señor —le dijo. ―¿Para quién? —preguntó Jehú. ―Para usted —le respondió el joven profeta.


Pero Dios había decidido que Ocozías muriera durante esta visita. Al poco tiempo de haber llegado, Ocozías y Jorán marcharon contra Jehú hijo de Nimsi, a quien el Señor había escogido para poner fin a la dinastía de Acab.


El Señor declara: «Este es el rey que he elegido. Lo he puesto en el trono de Jerusalén, mi santo monte».


Porque nadie en la tierra, desde el este hasta el oeste ni aun en el desierto, puede enaltecer a nadie;


Este es el mensaje del Señor para Ciro, ungido de Dios, a quien ha elegido para que conquiste muchas tierras. Dios dará poder a su mano derecha y él aplastará la fortaleza de poderosos reyes. Dios le abrirá las puertas de Babilonia, y las puertas no se le cerrarán más.


Lo que pasa en el mundo está bajo su control. Él quita reyes y coloca a otros sobre sus tronos. Él da a los sabios sabiduría, y a los entendidos su inteligencia.


»Esta es la sentencia que han dictado los vigilantes, la orden que han dado los santos. ¡El propósito de esta sentencia es que todo el mundo sepa que el Altísimo domina los reinos del mundo, y le da el gobierno a quien quiere, aun al más humilde de los hombres!


Serás separado de la gente para vivir con los animales en los campos, y para comer hierba como las vacas durante siete años hasta que finalmente te des cuenta que el Dios Altísimo gobierna sobre todos los reinos de la tierra y se los da a quien él quiere».


Entonces Samuel tomó una redoma de aceite de oliva y lo derramó sobre la cabeza de Saúl, lo besó en la mejilla y le dijo: ―Hago esto porque el Señor te ha señalado para que seas el rey de su pueblo, de Israel.


Él empobrece a unos y enriquece a otros; él abate a algunos y enaltece a otros.


Él levanta al pobre desde el polvo, desde el montón de cenizas, y lo sienta entre los príncipes ubicándolo en un lugar de honor. »Porque el Señor tiene dominio sobre la tierra.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí