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2 Reyes 6:14 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

14 Entonces, una noche, el rey de Siria envió un gran ejército con muchos carros y caballos que rodearon la ciudad.

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Biblia Reina Valera 1960

14 Entonces envió el rey allá gente de a caballo, y carros, y un gran ejército, los cuales vinieron de noche, y sitiaron la ciudad.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Así que una noche, el rey de Aram envió un gran ejército con muchos caballos y carros de guerra para rodear la ciudad.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Entonces el rey despachó para allá abajo caballos, carros y un numeroso destacamento; llegaron de noche y cercaron la ciudad.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Entonces envió allá caballos y carros,° y un numeroso ejército, los cuales llegaron de noche y rodearon la ciudad.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Y envió allá caballos, carros y un fuerte destacamento, que llegaron de noche y rodearon la ciudad.

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2 Reyes 6:14
10 Tagairtí Cros  

Sin embargo, el rey de Asiria envió desde Laquis a uno de sus altos oficiales el Tartán, a su tesorero principal el Rabasaris, y al copero mayor el Rabsaces, para que fueran a atacar a Jerusalén. Estos subieron y acamparon en el canal del estanque superior, que está junto al campo donde era blanqueada la ropa.


―¡Vayan y averigüen dónde está! ¡Enviaré soldados para que lo tomen preso! —exclamó el rey. Pronto llegó el informe: «Eliseo está en Dotán».


Al día siguiente, cuando el criado del profeta se levantó temprano y salió al exterior, vio las tropas, los caballos y los carros por toda la ciudad. ―¡Ay, señor mío! ¿Qué haremos ahora? —exclamó ante Eliseo.


No había terminado de pronunciar estas palabras cuando Judas, uno de los doce, se acercó al frente de una turba armada con espadas y palos. Iban en nombre de los líderes judíos y


Luego dijo a la turba: ―¿Soy acaso un asesino tan peligroso que tienen que venir con espadas y palos a arrestarme? Todos estos días he estado enseñando en el templo y no me detuvieron.


»Cuando vean a Jerusalén rodeada de ejércitos, sepan que su destrucción está cerca.


Saúl y David estaban ahora en laderas opuestas de una montaña. Saúl y sus hombres comenzaron a rodearlos. David hizo todo lo posible por escapar, pero, al parecer, estaba perdido.


reunió tres mil hombres escogidos de todo Israel y salió a buscarlo a las Rocas de las Cabras Monteses.


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