Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





2 Crónicas 32:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

15 No permitan que Ezequías los engañe. No le crean. Repito: ningún dios ha podido librar de mí o de mis antepasados a su pueblo; ¡cuánto menos el Dios de ustedes!”».

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

15 Ahora, pues, no os engañe Ezequías, ni os persuada de ese modo, ni le creáis; que si ningún dios de todas aquellas naciones y reinos pudo librar a su pueblo de mis manos, y de las manos de mis padres, ¿cuánto menos vuestro Dios os podrá librar de mi mano?

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

15 ¡No dejen que Ezequías los engañe! ¡No permitan que se burle así de ustedes! Lo vuelvo a repetir: ningún dios de ninguna nación o reino jamás ha sido capaz de librar a su pueblo de mí o de mis antepasados. ¡Mucho menos podrá su Dios librarlos a ustedes de mi poder!”».

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

15 Así, pues, que no los engañe Ezequías ni los seduzca con vanas promesas. No lo crean. Ningún Dios de ninguna nación o reino ha podido salvar a su pueblo de mi mano, ni de la mano de mis padres. ¡Cuánto menos podrán los dioses de ustedes librarlos de mi mano!'

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

15 Ahora pues, no os engañe Ezequías haciéndoos creer tales cosas, porque ningún dios de nación o reino alguno ha podido librar a su pueblo de mi mano ni de la mano de mis padres. ¡Cuánto menos vuestro Dios podrá libraros de mi mano!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Ahora, pues, que no os engañe Ezequías, ni os seduzca de este modo. No lo creáis. Porque si ningún dios de cualquier otro pueblo o reino pudo librar a su gente de mi mano ni de las manos de mis padres, ¡cuánto menos podrá libraros de mi mano vuestro Dios!'.

Féach an chaibidil Cóip




2 Crónicas 32:15
14 Tagairtí Cros  

“¿Cómo lo harás?”, le preguntó el Señor, y él respondió: “Yo iré como un espíritu mentiroso y hablaré por boca de sus profetas”. Y el Señor dijo: “Eso está bien; ve, porque tú lo lograrás”.


¡No permitan que el rey Ezequías los engañe! ¡Él jamás podrá salvarlos de mi poder!


«No te dejes engañar por ese Dios en quien crees. No le creas cuando dice que nosotros no vamos a conquistar Jerusalén.


Lo que el rey Ezequías les pide es un suicidio, pues al permanecer allí, van a morir de hambre y de sed. No le crean cuando les dice que el Señor su Dios los salvará de mis manos.


De esta manera los embajadores se burlaban de Dios y de Ezequías el siervo de Dios, y los insultaban.


―¡Que el Señor los ayude! —respondió el faraón—. ¿Acaso creen que les dejaré llevar a los pequeños? ¡Ya veo lo que están planeando!


―¿Conque esas tenemos? —replicó el faraón—. ¿Quién es el Señor para que yo tenga que obedecerlo y dejarlos ir? Yo no conozco al tal Señor, así que no dejaré salir a Israel.


No permitan que Ezequías los prive de todo esto diciendo que el Señor los librará de mis ejércitos. Los dioses de alguna otra nación, ¿han triunfado jamás sobre los ejércitos del rey de Asiria?


Diciendo esto, te vanagloriaste con grandes palabras presuntuosas contra el Señor. ¡Y yo las he oído todas!


Les daré una oportunidad. Cuando oigan la música, si se inclinan y rinden homenaje a la estatua, no tomaré en cuenta su falta; pero si se niegan a hacerlo, serán arrojados inmediatamente en un horno de fuego ardiente. Y entonces, ¿qué dios podrá librarlos de mi castigo?


Aun llegó a desafiar al jefe del ejército del cielo al prohibir los sacrificios rituales diarios que se le ofrecían, además de echar por tierra el lugar más sagrado de su templo.


Como ustedes bien saben, porque lo han visto y oído, ese tal Pablo ha convencido a un grupo numeroso de personas de que los dioses fabricados no son dioses.


Como han visto, no estoy tratando de ganármelos ni de quedar bien con ustedes. Al único que trato de agradar es a Dios. Si todavía buscara agradar a los hombres, no sería siervo de Cristo.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí