Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





2 Crónicas 10:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

15 Así el rey rechazó las demandas del pueblo. (Dios lo hizo reaccionar de esa manera a fin de que se cumpliera lo que le había dicho a Jeroboán por intermedio de Ahías el silonita).

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

15 Y no escuchó el rey al pueblo; porque la causa era de Dios, para que Jehová cumpliera la palabra que había hablado por Ahías silonita a Jeroboam hijo de Nabat.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

15 Por lo tanto, el rey no prestó atención al pueblo. Este giro en la historia ocurrió por voluntad de Dios, porque cumplía el mensaje que el Señor le había dado a Jeroboam, hijo de Nabat, por medio del profeta Ahías de Silo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

15 No escuchó el rey al pueblo, pues se trataba de una intervención de Dios para dar cumplimiento a la promesa que Yavé había hecho a Jeroboam, hijo de Nabat, por medio de Ajías de Silo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

15 Así el rey no escuchó al pueblo, porque era designio de Dios,° para que YHVH cumpliera su palabra dicha por medio de Ahías silonita a Jeroboam ben Nabat.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 No escuchó, pues, el rey al pueblo, porque así estaba dispuesto por Dios, para que se cumpliese la palabra que Yahveh había anunciado, por medio de Ajías de Siló, a Jeroboán, hijo de Nebat.

Féach an chaibidil Cóip




2 Crónicas 10:15
20 Tagairtí Cros  

Absalón y los hombres de Israel dijeron: ―El consejo de Husay es mejor que el de Ajitofel. Eso sucedió porque el Señor había dispuesto que se anulara el consejo de Ajitofel, cuyo plan realmente era el mejor, para que pudiera venir el desastre sobre Absalón.


De modo que Roboán no tuvo en cuenta las peticiones del pueblo. Esto estaba de acuerdo con la voluntad del Señor, y de esta forma se cumplió lo que él le había prometido a Jeroboán por medio de Ahías, el profeta de Siló.


Entonces el Señor preguntó: “¿Quién irá a inducir a Acab para que vaya y muera en Ramot de Galaad?”. Varias sugerencias se hicieron, hasta que un ángel se acercó al Señor y le dijo: “Yo lo seduciré”.


y había preferido el de los jóvenes. Les habló en los siguientes términos: ―¡Si mi padre estableció pesados impuestos, yo les pondré otros aún más pesados! ¡Si mi padre los azotó con látigos, yo los azotaré con alacranes!


que este es el mensaje que yo, el Señor, les doy: “No peleen contra sus hermanos. Vuélvanse a su tierra, por cuanto ellos se han rebelado por disposición mía”». Por tanto, obedecieron al Señor, y no fueron a pelear contra Jeroboán.


Pero Dios había decidido que Ocozías muriera durante esta visita. Al poco tiempo de haber llegado, Ocozías y Jorán marcharon contra Jehú hijo de Nimsi, a quien el Señor había escogido para poner fin a la dinastía de Acab.


El resto de la biografía de Salomón está escrito en la historia del profeta Natán, en la profecía de Ahías el silonita, y en las visiones del vidente Idó con respecto a Jeroboán hijo de Nabat.


El Señor les envió espíritu de necedad para que todo lo que sugieran sea equivocado. Hacen que Egipto se tambalee como un borracho enfermo.


Los soldados se dijeron unos a otros: ―No la dividamos. Mejor echemos suertes para ver a quién le toca. Y así lo hicieron, y de esta forma se cumplió la Escritura que dice: «Se repartieron mi manto, y sobre mi túnica echaron suertes».


Pero, de acuerdo con el plan que Dios ya tenía trazado, permitió primero que ustedes lo clavaran en la cruz y lo asesinaran por medio de hombres malvados.


Pero sólo están haciendo lo que tú en tu plan ya habías decidido que sucediera.


»Pero el rey Sijón se negó, porque el Señor nuestro Dios hizo que se endureciera, para poder destruir a Sijón con las manos de Israel como ahora ya lo ha hecho.


El padre y la madre no comprendieron que el Señor estaba tras aquella petición, porque estaba preparando una trampa a los filisteos que en aquel tiempo dominaban a Israel.


el pecado ordinario recibe un fuerte castigo, pero ¿cuánto más los pecados que ustedes cometen contra el Señor?». Sin embargo, ellos no quisieron escuchar a su padre porque el Señor había resuelto que murieran.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí