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2 Corintios 6:7 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

7 Hemos sido veraces gracias al poder de Dios. Nuestra arma para atacar y defendernos ha sido la justicia.

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Biblia Reina Valera 1960

7 en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Con fidelidad predicamos la verdad. El poder de Dios actúa en nosotros. Usamos las armas de la justicia con la mano derecha para atacar y con la izquierda para defender.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

7 con las palabras de verdad y con la fuerza de Dios, con las armas de la justicia, tanto para atacar como para defendernos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

7 en palabra de verdad, en poder de Dios mediante armas de justicia, las de ataque y de defensa,°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 con palabra de verdad, con poder de Dios; mediante las armas de la justicia, las de la derecha y las de la izquierda;

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2 Corintios 6:7
27 Tagairtí Cros  

No me arrebates tu palabra de verdad, porque mi única esperanza está puesta en tus leyes.


¡El pueblo de Israel caminó a través del mar por tierra seca!


Por un lado, la sabiduría te ofrece larga vida y, por el otro, te otorga riquezas y honor.


Porque estará revestido de equidad y verdad.


Se vistió colocándose la justicia como armadura y puso en su cabeza la salvación como un yelmo. Se puso vestiduras de venganza y de santa furia.


Los discípulos salieron a predicar por todas partes. El Señor los ayudaba y confirmaba su palabra acompañándola con señales.


El poder del Señor estaba con ellos y muchas personas se hicieron creyentes y se convirtieron al Señor.


Pero para los llamados, ya sean judíos o gentiles, Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios.


Su débil cuerpo humano murió en la cruz, pero ahora vive por el poder de Dios. Nosotros también, al igual que él lo era, somos débiles; pero ahora, unidos a él, vivimos y tenemos el poder de Dios para tratar con ustedes.


Nosotros fuimos enviados por Dios para anunciar el evangelio con sinceridad delante de Dios, porque estamos unidos a Cristo. No somos como esos que predican la palabra de Dios por lucro.


No engañamos a nadie, ni cambiamos la palabra de Dios. No tenemos de qué avergonzarnos, ni hacemos maldades a escondidas. Al contrario, delante de Dios hablamos y proclamamos la verdad ante todas las personas.


Me alegró mucho que no me hicieran quedar mal. Al contrario, así como todo lo que les dijimos a ustedes fue verdad, también lo que le dije a Tito de ustedes resultó cierto.


Gracias también a lo que Cristo hizo, cuando ustedes escucharon el mensaje verdadero de las buenas noticias de salvación y creyeron en él, fueron marcados con el sello que es el Espíritu Santo que él había prometido.


A Dios sea la gloria, pues por su poder eficaz que actúa en nosotros, él puede hacer muchísimo más de lo que nos podemos imaginar o pedir.


Si de veras han escuchado acerca del Señor y han aprendido a vivir como él, saben que la verdad está en Jesús.


Ustedes se comportan así motivados por la esperanza de lo que está guardado para ustedes en el cielo. De ello se enteraron por medio del mensaje verdadero del evangelio.


Nosotros, por el contrario, somos del día. Por eso estamos siempre en nuestro sano juicio, protegidos por la coraza de la fe y del amor, y por el casco de la esperanza de salvación.


Haz todo lo que sea posible para presentarte ante Dios aprobado, como un obrero que no tiene de qué avergonzarse porque interpreta correctamente la palabra de Dios.


He peleado la buena batalla, he llegado al final de la carrera y me he mantenido fiel.


Además, Dios confirmó su mensaje acerca de esta verdad por medio de señales, prodigios, diversos milagros y dones que el Espíritu Santo distribuye según su voluntad.


Él quiso darnos vida por medio de la palabra de verdad, para que fuéramos los primeros frutos de su creación.


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