Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





2 Corintios 5:14 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

14 El amor de Cristo nos domina, porque estamos convencidos de que Cristo murió por todos, y por eso todos han muerto.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

14 Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Sea de una forma u otra, el amor de Cristo nos controla. Ya que creemos que Cristo murió por todos, también creemos que todos hemos muerto a nuestra vida antigua.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 El amor de Cristo nos urge, y afirmamos que si él murió por todos, entonces todos han muerto.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

14 Porque el amor del Mesías nos constriñe, pensando esto:° que si Uno murió por todos, entonces todos murieron;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Pues el amor de Cristo nos apremia cuando pensamos que uno murió por todos. Por consiguiente, todos murieron.

Féach an chaibidil Cóip




2 Corintios 5:14
43 Tagairtí Cros  

estos tres valientes se abrieron paso a través del campamento filisteo, sacaron agua del pozo y se la trajeron a David. Pero este rehusó beberla, y la derramó como una ofrenda al Señor y exclamó: «¡Que Dios me libre de beber esta agua! ¡Si la bebo, sería como beberme la sangre de estos hombres que arriesgaron su vida por complacerme!».


Porque me siento ansioso y lleno de palabras: mi espíritu me impulsa.


¡Llévame contigo; vámonos corriendo! ¡Qué felices seremos! Tu amor es mejor que el vino. ¡Con razón te aman todas las doncellas!


Nosotros fuimos quienes nos extraviamos como ovejas, nosotros, quienes seguimos nuestro propio camino. ¡Pero Dios echó sobre él la culpa y los pecados de cada uno de nosotros!


Recuerden que yo, el Hijo del hombre, no vine para que me sirvan, sino para servir y dar mi vida en rescate de muchos.


porque este hijo mío estaba muerto pero ha vuelto a vivir; se había perdido y lo hemos encontrado”. Y comenzaron la fiesta.


Pero teníamos que hacer fiesta y alegrarnos, pues tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida, se había perdido y lo hemos encontrado”».


pero ellos le dijeron con insistencia: ―Quédate con nosotros. Es muy tarde, ya es casi de noche. Así lo hizo, y entró para quedarse con ellos.


Al día siguiente Juan vio que Jesús se acercaba a él, y exclamó: «¡Aquí viene el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!


Jesús le dijo: ―Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá;


Les aseguro que ya viene la hora, y ya ha llegado, en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan vivirán.


Después que Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, se dedicó por entero a predicar la palabra y a testificar entre los judíos que Jesús era el Mesías.


Y sabemos que Dios, en su verdad, castigará a cualquiera que actúe de esa forma.


Sin embargo, no hay comparación entre el pecado de Adán y el regalo que Dios nos da: El primer hombre provocó la muerte de muchos con su pecado; pero por el amor de otro hombre, Jesucristo, abundó para muchos el amor y el regalo gratuito de Dios.


No entreguen ninguna parte de su cuerpo al pecado para que se convierta en instrumento del mal. Más bien, entréguense por completo a Dios, como quienes ya han muerto y han vuelto a vivir. Y preséntenle sus miembros como instrumentos para la justicia.


Sabemos que nuestra vieja naturaleza pecaminosa fue clavada en la cruz junto con Cristo; de esta manera, ya no está bajo el dominio del pecado, ni tiene que someterse a la esclavitud del pecado,


Si alguien no ama al Señor, que Dios lo maldiga. ¡Ven, Señor nuestro!


El que no tiene el Espíritu no puede aceptar lo que viene del Espíritu de Dios, pues le parece una locura. No lo puede entender, porque hay que discernirlo con la ayuda del Espíritu.


El ministerio que conducía a la muerte fue grabado en piedras; era tan glorioso que el pueblo no podía fijar la vista en el rostro de Moisés. Esto se debía a que el rostro le resplandecía con la gloria de Dios, si bien aquella brillantez ya se estaba desvaneciendo.


Si el ministerio que conducía a la condenación fue tan glorioso, cuánto más glorioso será el ministerio que justifica al hombre ante Dios.


Estoy crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí. Y esta vida que ahora tengo la vivo por mi fe en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó por mí.


Que la gracia de Dios esté sobre todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inagotable.


De hecho, ustedes estaban muertos a causa de sus pecados y no se habían despojado de su naturaleza pecaminosa; pero Dios nos vivificó con Cristo y nos perdonó los pecados.


Después de todo, ustedes están muertos y su vida está escondida con Cristo en Dios.


Él dio su vida en rescate por todos. Este es el mensaje que Dios, a su debido tiempo, dio a conocer al mundo.


Pero la viuda que se entrega al placer, ya está muerta en vida.


En otro tiempo, también nosotros éramos insensatos y desobedientes; con facilidad nos descarriábamos y vivíamos esclavos de los placeres y de los deseos pecaminosos. Estábamos llenos de rencor y envidia. Odiábamos a los demás y ellos nos odiaban a nosotros.


Sin embargo, vemos a Jesús, que fue hecho un poco inferior a los ángeles, y lo vemos coronado de gloria y honra por haber padecido la muerte por nosotros. De esta forma, por la gracia de Dios, la muerte de Jesús fue de beneficio para todos.


Dios no es injusto. ¿Cómo podría él olvidar el ardor con que ustedes han trabajado o el amor que le han demostrado y le siguen demostrando al ayudar a los del pueblo santo?


Ustedes aman a Jesucristo a pesar de que no lo han visto; y aunque ahora no lo ven, creen en él y se llenan de una gran alegría,


Sabemos que somos hijos de Dios. El mundo que nos rodea está bajo el dominio de Satanás,


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí