2 Corintios 10:3 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

³ Sí, es cierto, vivimos en este mundo, pero nunca actuamos como el mundo para ganar nuestras batallas.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

³ Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne;

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Somos humanos, pero no luchamos como lo hacen los humanos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ Humana es mi condición, pero no lo es mi combate.

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Porque aunque vivimos en la carne, no militamos según la carne.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Porque, aunque vivimos en carne, no según la carne combatimos.

2 Corintios 10:3 Tagairtí Cros

Romanos 7:5

Cuando vivíamos de acuerdo con nuestra naturaleza pecaminosa, los deseos pecaminosos actuaban en nosotros, estimulados por la ley. Lo que producían en nosotros era muerte.

Romanos 8:13

Si lo siguen haciendo perecerán; pero si mediante el poder del Espíritu hacen morir a la naturaleza pecaminosa y sus obras, vivirán.

Romanos 8:4

Por eso, si vivimos según el Espíritu Santo y negamos obediencia a nuestra vieja naturaleza pecaminosa, podemos obedecer las justas demandas de la ley de Dios.

2 Corintios 1:17

¿Por qué cambié de planes? ¿Estaría de veras decidido? ¿O soy de los que dicen «sí» aunque por dentro están diciendo «no»?

2 Corintios 10:4

Para destruir las fortalezas del mal, no empleamos armas humanas, sino las armas del poder de Dios.

Gálatas 2:20

Estoy crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí. Y esta vida que ahora tengo la vivo por mi fe en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó por mí.

1 Timoteo 1:18

Ahora, Timoteo, hijo mío, fíjate en este mandamiento que te doy: Pelea la buena batalla, tal como dicen las profecías que se hicieron en cuanto a ti.

2 Timoteo 4:7

He peleado la buena batalla, he llegado al final de la carrera y me he mantenido fiel.

Hebreos 12:1

Por eso, también nosotros, que estamos rodeados de tantos testigos, dejemos a un lado lo que nos estorba, en especial el pecado que nos molesta, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.